Detalló que de ese número de fallecidos, nueve perecieron en accidentes de tránsito y siete por asfixia por sumersión, es decir que murieron ahogados.
Mejía lamentó que entre las víctimas figuren cuatro niños de seis, siete, 10 y 14 años. Los menores fallecieron por asfixia por sumersión, a excepción del niño de 10 años que perdió la vida al caerse de la paila de un pick-up en marcha.
En ese sentido, recalcó que la responsabilidad por su vida, es de cada persona porque los organismos de socorro como la Policía Nacional, Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos, pueden hacer hasta lo imposible, pero hay personas que han muerto debido al exceso de velocidad y otros que probablemente bajo los efectos del alcohol, no han medido las consecuencias y se han lanzado de partes muy altas hacia una profunda poza y han perdido la vida.
Detalló que asimismo, se contabilizan 30 personas lesionadas que han tenido que recibir asistencia médica, algunos de ellas están en estado grave.
Recordó que aún quedan cuatro días del feriado de Semana Santa y todavía hay desplazamientos de personas a los 450 sititos turísticos del país a quienes pidió actuar con serenidad y sin cometer excesos a fin de preservar sus vidas.
Señaló que un grave problema es la alta ingesta de bebidas alcohólicas que también son una droga y el llamado es que disfruten sus vacaciones con calma y serenidad, especialmente a quienes van conduciendo automóviles.
Mejía indicó que Conapremm autorizó la salida de 659 autobuses y taxis de Tegucigalpa después de pasar por el proceso de revisión físico mecánica y otros 200 fueron rechazados por diferentes problemas.
