Tegucigalpa– Con el abordaje de grupos focales comunitarios, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) busca contrarrestar las barreras y obstáculos a los que se enfrentan por los impactos adversos el cambio climático informó el coordinador de la Defensoría de los Pueblos Indígenas, Afro Hondureños y Ambiente, Frank Cruz.
Indicó que los departamentos de Valle y Choluteca fueron escenario de sendos eventos para verificar y evaluar de manera integral el abordaje y avance en la implementación de políticas públicas, legislación, programas o proyectos en derechos humanos y cambio climático por parte del Estado de Honduras.
Explicó que uno de los objetivos es analizar el grado de avance en el cumplimiento de las obligaciones del Estado de hondureño en materia de derechos humanos y cambio climático que incluyen el derecho a la vida, a la salud, al agua, a la alimentación, a la vivienda, al trabajo, a un medio ambiente sano, a la tierra para los pueblos indígenas y los campesinos, el derecho de reunión pacífica, a la libertad y a la seguridad personal.
Es importante conocer del Grupo Focal Comunitario las barreras y obstáculos a los que se enfrentan por los impactos adversos al cambio climático y la respuesta estatal, dijo Cruz.
El evento, que se realizó en el marco del proyecto del “Grupo Referenciado sobre Cambio Climático y Derechos Humanos”, contó con la participaron grupos focales comunitarios integrados por pescadores artesanales, defensores del ambiente e interinstitucionales con la participación de representantes del Comité Permanente de Contingencias (COPECO), de la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (SERNA) y de la Secretaria de Agricultura (SAG-SENASA).
El Conadeh emitirá un documento sistematizado de los resultados de los grupos trabajo institucionales a nivel central como del Grupo Focal Comunitario en los departamentos de Intibucá, Atlántida, Cortés, Valle, Choluteca y Francisco Morazán.
Mujeres, las más afectadas por el cambio climático
Honduras, es considerado uno de los países más vulnerables a los impactos del cambio climático, lo que se traduce en considerables implicaciones para el disfrute de los derechos humanos por parte de su población.
En los últimos años, el país ha sufrido pérdidas significativas por el exceso de lluvias, huracanes y sequías.
En 1998, Honduras sufrió la “embestida” del huracán Mitch, calificado como la tormenta tropical más destructiva de la región del Caribe en 200 años, al que se suman los huracanes Eta e Iota en el 2020, que afectaron a más de 3,9 millones de hondureños, incluyendo muertes y graves daños en domicilios e infraestructura.
El resultado de diversos estudios evidencia que los países menos desarrollados y pobres son mucho más vulnerables ante los riesgos climáticos, siendo Honduras uno de los países más afectados, a nivel mundial, por el cambio climático debido a su ubicación geográfica entre el Océano Pacifico y el Atlántico que lo expone a un sinnúmero de fenómenos climáticos extremos que retrasan y debilitan su desarrollo.
Un estudio del Banco Mundial reveló que el 62% del territorio nacional, donde habita el 30.9% de la población hondureña experimenta riesgos ocasionados por el cambio climático.
Sin embargo, este fenómeno se agrava aún más debido a la condición de vulnerabilidad que enfrentan grupos como las mujeres que, en Honduras, no solo representan el 53.3% de la población total, sino que son jefas de hogar de, al menos, el 38.2% de los hogares.
El impacto desproporcionado que tiene el cambio climático afecta sobre todo a las mujeres, a las que expone aún más a la vulneración de sus derechos, lo cual contribuye a profundizar la estructural marginación y exclusión de ellas en procesos económicos, sociales y políticos, señaló Cruz.
Mencionó que otro aspecto es la baja titulación de tierras para las mujeres y las dificultades para el acceso a créditos agrícolas en comparación con los hombres. También se refirió a los altos índices de violencia doméstica, psicológica y sexual que experimentan en periodos de precariedad económica, así como durante y después de los fenómenos meteorológicos extremos. IR