Tegucigalpa. – En días recientes comenté como invitado, por casi 10 minutos, 5 exposiciones que me habían precedido en un Webinario, que duró casi 2 horas, auspiciado por la Fundación “NO MAS”, con actividades en Honduras y sede principal en Estados Unidos. El título del Conversatorio fue “Violencia de Género y Desplazamiento Forzado: La experiencia de América Latina”, efectuado el martes 7 de marzo, 2023, vía Zoom, en español, con acceso a participar a distancia y expositores de varios países latinoamericanos y de Estados Unidos.
En mis comentarios sobre las exposiciones destaqué la importancia que tienen las remesas en su doble expresión: remesas en efectivo y remesas de conocimiento, que las explicaré al final de este escrito.
También destaqué que, en su paso por Honduras para llegar a los Estados Unidos, están los nicaragüenses y de otras nacionalidades extraterritoriales –haitianos, cubanos y venezolanos– que, debido a su inesperado volumen, mantienen en crisis el manejo legal y ordenado de la inmigración que llega, más indocumentada que documentada, a las fronteras de Estados Unidos y México.
Igualmente, la invasión de Rusia a Ucrania, también ha aumentado el número de migrantes extraterritoriales en el área. Me refiero a los rusos que huyen de su país para evitar el servicio militar obligatorio y a los ucranianos que con sus familias buscan una nueva vida como refugiados de guerra con preferencia en Polonia, Hungría, Rumanía, Eslovaquia, Moldavia, Bielorrusia, España, Argentina, Estados Unidos y Canadá.
Para el presente escrito me limitaré a analizar el huracán Mitch, que afectó a Honduras y al resto de la región en 1998. Ello me permite comentar hechos, contenidos, procesos y contextos, que siguen siendo relevantes en los trabajos de migración en esta zona del mundo.
1: El huracán Mitch marca un antes y un después en la migración hondureña y centroamericana.
Llevo más de 20 años analizando la migración hondureña. Pero la decisión de quedarme trabajando en Honduras la hice en octubre del año 1998, fecha en que el Mitch pasó de tormenta tropical a huracán, azotando varios países de la región centroamericana. En su momento de mayor intensidad y destrucción, el 26 y 27 de octubre, registró vientos de 180 mph, equivalentes a 290 kilómetros por hora. Por eso, en la escala de Saffir-Simpson, se le consideró de categoría V (la máxima).
A nivel regional el Mitch dejó en Centroamérica a 2.7 millones de personas sin hogar, 19,000 muertos, un estimado de más de10 mil desaparecidos y 12,842 heridos. La mayoría de las muertes fueron causadas por inundaciones y deslaves. Algunos expertos creen que el Mitch mató a más personas que cualquier otro huracán del Atlántico ya conocido.
Su paso por Honduras fue el más destructor. Se presentó en el nordeste de Honduras el 26 de octubre de 1998 y recorrió la costa norte con lluvias torrenciales que duraron cuatro días debido al lento desplazamiento del huracán (a razón de 3 a 9 km/hora).
El terrible meteoro dejó en Honduras un saldo de casi 1.500.000 damnificados, entre ellos 5,657 muertos, 8,058 desaparecidos, 12,272 heridos y 285, 000 personas que perdieron sus viviendas y tuvieron que refugiarse en más de 1375 albergues temporarios. Se estima, además, que resultó seriamente dañando el 60% de la infraestructura vial del país, pues quedaron inutilizados 424 caminos y 107 carreteras, y destruidos 189 puentes, 81 ciudades quedaron incomunicadas en mayor o menor grados.
No hay datos precisos sobre el valor de las pérdidas materiales que causó el huracán. Pero por daños estimados a nivel regional, se calculan en algo más de cinco mil millones de dólares. Ese monto equivale casi al PIB de Honduras del año 1997, que fue de 5,737 millones, expresados en dólares del año. Por lo anterior, las autoridades nacionales declararon que Honduras, debido al Mitch, «retrocedió 30 años en sus expectativas de desarrollo».
Al nivel interno de los países con respecto a sus economías nacionales, los sectores más afectados por el Mitch fueron el comercio mayorista y minorista; las actividades comunitarias sociales y personales; hoteles y restaurantes; actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler, y las manufacturas.
Después de México, Honduras es hoy el segundo país latinoamericano que más personas expulsas a Estados Unidos en relación a su población total. Mientras que el 4% de la población mundial vive hoy en un país donde no nació, se estima que el 14 % de la actual población de Honduras vive actualmente en el extranjero. Y es a partir del Mitch 1998, que la emigración hondureña hacia los Estados Unidos mantiene un crecimiento creciente de año en año.
2: Efectos del Mitch: su legado en la Migración
Según el testimonio de un afectado por el Mitch, “el país quedó como una ventana rota en mil pedazos. Grandes y pequeños puentes quedaron destruidos, los deslizamientos de tierra obstruyeron los caminos e incluso las carreteras con pavimento fuerte se hundieron en los ríos. Muchas familias perdieron sus propiedades. Hoy en día, todavía sufrimos los efectos de Mitch; hay infraestructura que sigue destruida. En lugar de disminuir, los niveles de vulnerabilidad van en aumento”.
Según Vladimir López Recinos, doctor en Estudios del Desarrollo con especialidad en Migración nos dice:” la migración de centroamericanos hacia Estados Unidos es un fenómeno complejo vinculado a factores económicos, políticos, sociales y ambientales, entre los que se incluyen desastres naturales. En Honduras, la población cada vez más está emigrando a Norteamérica: desde 1960 registra un aumento de menor escala, pero a partir de 1990 (más a finales es de las décadas por el Mitch) la emigración se tornó explosiva y de carácter compulsivo.
A diferencia de las primeras migraciones de hondureños a Estados Unidos ocurridas en el primer cuarto del siglo XX, el actual desplazamiento es un fenómeno más complejo y multifacético. En el contexto global neoliberal, puede conceptualizarse como una migración compulsiva y forzada, hasta convertirse en un largo proceso que afecta a los trabajadores migrantes y sus familiares, pero (que) simultáneamente tiene elevados costos y consecuencias para los países de origen, tránsito y destino final”.
3: CAPACITACIONES Y CURSOS ACADEMICOS DE MIGRACIÓN, POR TEMAS RELACIONADOS, SEGÚN GENERO, MATRICULADOS Y GRADUADOS.
Y…también hay beneficios que resultan de la migración: remesas en efectivo –que sobrepasan los 8 mil millones de dólares anualmente, y remesas de conocimiento. Estas últimas con frecuencia ignoradas y a veces entendidas como sinónimas de “sociales” o “institucionales”. Las remesas de conocimiento se evidencian en ideas innovadoras, redes transnacionales valiosas, conceptos, valores políticos, reformas de política y nuevas competencias o institucionales y tecnológicas, relativas todas a las carreras tipo STEM, por sus siglas en inglés, relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Por lo tanto, las carreras STEM son las que incluyen conocimientos y prácticas, diplomados, con certificados de participación y de cátedras, dando títulos universitarios en alguna o varias de las 5 disciplinas mencionadas.
En Costa Rica la matrícula y títulos otorgados en dichas carreras reportan una mayor demanda de hombres que de mujeres beneficiadas. Para el año 2021, según reportes publicados en medios. La Universidad de Costa Rica, la Universidad Nacional, la UNED, el Tecnológico de Costa Rica y la Universidad Técnica Nacional reportaron 22.555 nuevos estudiantes al arrancar el año pasado, de los cuales, 11.225 optaron por una carrera tipo STEM.
Como cierre, cito un interlocutor válido que nos destaca otro tema: “en Chile no se han desarrollado investigaciones sobre la formación del profesorado de Educación Física, considerando la matrícula desde la perspectiva de género. “Con el propósito de atender esta cuestión, el presente trabajo se ha fijado como objetivo describir, desde la perspectiva de género, el comportamiento de las matrículas femeninas y masculinas en los estudios de Pedagogía en Educación Física en las universidades chilenas, a partir de un enfoque cuantitativo, con diseño no experimental, retrospectivo y de alcance exploratorio-descriptivo, que analizó datos sobre la matrícula en Pedagogía en Educación Física en el periodo 2005-2019.
Para ello, se empleó la información de fuentes oficiales que mantienen un acceso abierto. Los resultados del análisis de las matrículas femeninas muestran un comportamiento que tiende a una disminución sistemática en la elección de las mujeres por esta carrera, lo que presenta una importante brecha negativa de género, que no es concordante con el comportamiento de las carreras del área pedagógica en general, ni con la matrícula de las instituciones de nivel superior”.
Por lo tanto, concluyo que, en Chile, en las carreras de Pedagogía en Educación Física se mantiene una clara hegemonía de matrículas masculinas sobre las femeninas. ¿Cómo eso se repite en Honduras, cómo y a qué nivel?