Quito- El candidato indígena, Yaku Pérez, mantiene este jueves, cuatro días después de las elecciones en Ecuador, un pulso con las autoridades electorales y de fiscalización, por un supuesto fraude del que dice ser objeto y por el que ha pedido se recuenten voto a voto las actas de siete provincias del país.
El domingo algo más de 13 millones de ecuatorianos votaron a su presidente y vicepresidente, 137 miembros del Parlamento y cinco parlamentarios andinos, pero la puja por quién será el segundo de la segunda vuelta electoral mantiene en vilo al país y arroja dudas acerca de cómo se desarrolla un escrutinio que aún no ha finalizado.
De acuerdo con la web oficial del CNE, el candidato correísta, Andrés Arauz, sigue encabezando la liza presidencial para la nueva ronda del 11 de abril con el 32,64 % de votos, seguido hasta el momento por el centroderechista Guillermo Lasso, que suma el 19,70% y pasaría al balotaje.
Mientras que Pérez se mantiene en tercer lugar con el 19,46% del sufragio.
NO TIRA LA TOALLA
El aspirante del movimiento político Pachakutik, que en los primeros días figuraba como segundo, pasó el miércoles a la tercera posición a medida que se contabilizaban las actas de la región Costa, si bien viene advirtiendo desde la noche electoral de inconsistencias y un posible amaño para perjudicarle.
La diferencia de votos entre el segundo y el tercer candidato es de unos 20.000 y Pérez supera a Lasso en 16 de las 24 provincias del país, pero el conservador registra mayor predicamento entre las más pobladas como Guayas (Guayaquil), Pichincha (Quito) y Manabí.
En un video emitido por un canal de televisión local, Lasso aseguraba que había «quedado claro» que pasaba a segunda vuelta y asumía «liderar esa aspiración de la mayoría del pueblo ecuatoriano que votó por la democracia, por la libertad, por un Ecuador de oportunidades».
Sin mencionar a ningún contrincante, el candidato liberal cristiano aseguraba, además, no tener «ningún inconveniente» en incluir en su programa de gobierno las propuestas «de amplios sectores ciudadanos que votaron por otros candidatos».
¿HABRA RECUENTO VOTO A VOTO?
La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Ecuador, Diana Atamaint, se mostró este jueves partidaria de analizar una petición del presidencial indígena para el recuento voto a voto en siete provincias.
«El candidato Yaku Pérez ha ingresado una solicitud de recuento voto a voto en: Guayas, Manabí, Los Ríos, Esmeraldas, El Oro, Pichincha y Bolívar. Para ratificar la transparencia de este proceso considero que el Pleno del CNE debe aprobarlo», manifestó en su cuenta de Twitter.
El consejero de la entidad Luis Verdesoto también apoyó esa medida, pero su preferencia es que «se abran las urnas donde hay denuncias precisas producto de la observación electoral. Sugiero esto sea entre hoy y mañana», comentó en otro trino al advertir: «Lo que no se puede hacer es abrir todas las urnas del país porque alguien pierde».
Pérez acudió de mañana a la sede del órgano electoral en Quito para hacer entrega de su petición, mientras que asambleístas de su grupo político presentaban ante la Fiscalía General de Guayas una denuncia penal por el delito de fraude electoral contra el CNE.
Por la tarde el dirigente se reunió con el contralor general del Estado, Pablo Celi, para solicitarle «una auditoría técnico forense electoral» en las mesas y actas que registraron irregularidades.
Como respaldo a sus denuncias, expone inconsistencias numéricas en el escrutinio, ausencia de actas, falta de padrones y disparidades entre los datos introducidos y las actas.
Su movimiento había convocado para la jornada una marcha pacífica «por la paz y la democracia» en las sedes provinciales del CNE, secundada por simpatizantes en todo el país, especialmente en Quito y Guayaquil, bajo la consigna de «¡Yaku, amigo, el pueblo está contigo!».
La tensión en Guayaquil, epicentro de la discordia, es tal, que la sede del CNE en esa ciudad está siendo custodiada por unos 600 militares y 200 policías.
Además de acudir a los organismos de control y fiscalización del Estado, Pérez exhortó hoy a Lasso a que «lidere la reapertura de urnas y quien resulte ganador, hacemos un frente a la corrupción».
Posteriormente le invitó en redes a un diálogo en el CNE en Quito «para solicitar, junto a los otros candidatos, la apertura de urnas y un conteo voto a voto con un delegado de cada partido y ante los veedores de la OEA».
¿QUE DICEN LOS OBSERVADORES?
La Misión de Observación Electoral (MOE) de la OEA pidió este jueves responsabilidad a las partes involucradas en el recuento pero no se manifestó sobre la esencia de las denuncias presentadas.
«El margen entre los aspirantes que ocupan el segundo y el tercer lugar es muy estrecho. Es fundamental que los binomios en contienda tengan la certeza de que sus votos están siendo cuidados por las autoridades electorales», reza un comunicado emitido por la Misión, encabezada por la exvicepresidenta panameña Isabel de Saint Malo.
Por su parte, la observadora electoral de la Ceela (Consejo de Expertos Electorales de Latinoamérica), Marina Urrizola, reconoció hoy que se podían producir inconsistencias en las actas, lo que según ella, «no significa fraude».
«Inconsistencias en las actas, que no significa fraude, es cuando se suma y no se suma bien», declaró en una comparecencia en la que explicó que las incidencias se habían producido por errores humanos que ella atribuyó al cansancio de los integrantes de las juntas electorales.
(ir)