Londres – Unos treinta inmigrantes protagonizan hoy un altercado en un centro de deportación de Inglaterra tras la muerte ayer de uno de los detenidos, ha informado el Ministerio del Interior británico.
De acuerdo con un portavoz, varios policías y guardas de seguridad intentan controlar la situación en el Centro de Expulsión de Inmigración de Morton Hall, cerca de la ciudad de Lincoln, sin que de momento haya habido heridos.
Aunque el Gobierno no ha ofrecido detalles, los medios británicos explican que los reclusos protestaron esta mañana por la muerte de su compañero e hicieron sonar una alarma, mientras que, más tarde, muchos se han negado a volver a sus habitaciones.
Durante el día, el personal del centro de detención fue trasladado a otro lugar por temores por su seguridad.
«Un altercado en el que están implicados varios detenidos tiene lugar en Morton Hall», dijo el portavoz de Interior.
«Personal especialmente entrenado ha sido enviado para que la situación se resuelva de manera segura», añadió esta fuente, para señalar que de momento «no se ha informado de heridos» ni entre los detenidos ni entre los guardas.
El secretario de Estado de Inmigración y Seguridad, James Brokenshire, ha prometido por su parte investigar las circunstancias de la muerte del detenido que falleció la pasada noche.
«Nuestros pensamientos están con la familia en este triste momento», afirmó el funcionario, quien aseguró que «las muertes en los centros de detención son acontecimientos inusuales pero tristes».
«Tomamos muy seriamente nuestras responsabilidades para con la salud y el bienestar de los detenidos, y en este caso, como en cualquier muerte bajo custodia, se ha puesto en marcha una exhaustiva investigación», declaró.
Morton Hall, en el pueblo de Swinderby, en el centro de Inglaterra, está dirigido por el Servicio de Presiones para la Agencia de Aduanas.
Tiene 392 habitaciones repartidas en seis unidades y alberga a hombres adultos.
