París- El Gobierno francés desplegará un importante dispositivo de seguridad para la reapertura de Notre Dame, el fin de semana próximo, con varios miles de policías y soldados, además de fuertes restricciones de movimiento en el centro de París ante un nivel «muy elevado» de amenaza terrorista.
«Estamos en un muy alto nivel de amenaza terrorista, como en los Juegos», dijo en una entrevista que publica este lunes ‘Le Parisien’ el prefecto de la Policía de París, Laurent Nuñez, responsable también, durante los JJ.OO. de París del pasado verano, de blindar la capital francesa.
Aunque serán unas 3.000 las personas que podrán entrar a la catedral gótica restaurada tras el incendio de 2019 -entre ellas se espera al menos un centenar de jefes de Estado y de Gobierno- se calcula que 40.000 puedan estar en los aledaños del templo y ver la ceremonia de reapertura en pantallas gigantes.
Núñez no aportó cifras concretas del número de fuerzas de seguridad que se desplegarán y señaló que serán «varios miles». No obstante, detalló que habrá también un grupo de francotiradores y militares de la operación antiterrorista Sentinelle.
A pesar de que las autoridades francesas no tienen constancia de una amenaza concreta, Nuñez citó «la amenaza islamista» como la que más concentra «las preocupaciones».
En un draconiano dispositivo inspirado en el de los Juegos Olímpicos Francia blindará la Isla de la Cité, la pequeña isla que forma el Sena en el centro de la ciudad en la que se levanta Notre Dame. Para ello, cerrará varias estaciones de metro y de trenes de cercanías de la zona, comercios y restaurantes.
«Desde el sábado (7) a las 7.00 horas hasta el domingo (8) a las 20.00 horas, activaremos el perímetro SILT (Seguridad Interior de Lucha contra el Terrorismo), que englobará a la Isla de la Cité y también a algunos edificios de la margen izquierda de la orilla del Sena», explicó.
«Los vecinos -añadió- podrán ir a sus domicilios, pero tendrán que tener justificantes».
Las restricciones afectarán también a la navegación en el río Sena (los barcos con turistas y la barcazas de carga pasan al lado del templo de forma habitual) y la circulación aérea estará prohibida sobre París durante las ceremonias de reapertura.
Según datos de la Oficina de Turismo, del 2 al 8 de diciembre, habrá un 18 % más de turistas que la misma semana de 2023. EFE/ir