Tegucigalpa– La Coalición Nacional por la Movilidad Humana (CONAMUH), expreso su profunda preocupación por la situación de las personas en movilidad humana en Honduras y reafirmar el compromiso en la defensa de sus derechos humanos.
CONUMUH destacó el esfuerzo articulado de la sociedad civil en la defensa y protección de los derechos humanos de las personas en situación de movilidad humana. A través de este esfuerzo colectivo, logramos la creación de la Coalición Nacional por la Movilidad Humana, una alianza que une organizaciones y actores humanitarios comprometidos con la promoción y protección de los derechos de todas las personas en tránsito, así como de aquellas que se encuentran en situación de retorno, desplazamiento forzado o desplazamiento por razones de violencia basada en género.
En su pronunciamiento, subrayaron que los derechos no tienen fronteras. En este sentido, como Coalición, exigimos que el Estado de Honduras tome medidas concretas para garantizar la protección, asistencia y atención integral de las personas en situación de movilidad humana (desplazadas por violencia, retornados y migrantes en tránsito, personas en situación de movilidad forzada).
Es urgente que el país desarrolle políticas públicas que respondan a la realidad de las personas en situación de movilidad humana, incluyendo mecanismos adecuados de atención y protección a nivel interno y del corredor migratorio, todos los puntos de tránsito, que se asegure el establecimiento de mecanismos que garanticen soluciones duraderas a los sectores relacionados, para fines de observación de estándares internacionales que posibiliten y que aseguren condiciones de dignidad y respeto, a la población en referencia.
Asimismo, denunciaros de manera contundente las prácticas de corrupción y abuso que se han venido perpetúan en el contexto de emergencia migratoria.
Las personas en situación de movilidad humana, en su tránsito por Honduras, son constantemente víctimas de extorsiones, coimas, estafas, y otros actos de delincuencia común que violentan sus derechos y atentan contra su seguridad. Estas actividades ilícitas, perpetradas por las redes instaladas del crimen organizado coludidas con estructuras públicas y nacionales, que inclusive han sido denunciadas internacionalmente, agravan aún más las condiciones de vulnerabilidad de las personas en situación de movilidad humana, quienes ya enfrentan obstáculos enormes en su búsqueda de una vida digna y segura.
En síntesis, indicar que demandamos de manera urgente una reforma profunda en los sistemas de atención y protección que garantice los DDHH a la población en situación de movilidad humana en el país.
En conclusión, la CONAMUH, presenta al gobierno de Honduras y en general al Estado:
Desarrolle y ejecute políticas públicas inclusivas que aborden de manera integral las necesidades de atención y protección de las personas en situación de movilidad humana, desplazadas y retornadas, especialmente aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
Asimismo, que garantice la protección de los derechos humanos de las personas migrantes a lo largo de su trayecto en tránsito por el corredor migratorio se garanticen sus derechos humanos y asegurando entre otros el acceso a servicios básicos de salud, alimentación, y seguridad principalmente.
También combatir de manera efectiva la corrupción y las redes criminales que operan a costa de las personas, implementando medidas contundentes contra las extorsiones y delitos que sufren estas personas sujetas de derecho.
Además de fortalecer la capacidad de logística del Estado, para que las instituciones encargadas de la asistencia humanitaria responder a la crisis humanitaria de manera adecuada a las necesidades de las personas en situación de movilidad humana en y en tránsito por Honduras.
Finalmente, hicieron un llamado a la solidaridad de la comunidad internacional, a las organizaciones sociales, y a las organizaciones de defensores (as) de derechos humanos para que sigamos articulando esfuerzos. “En la lucha por un mundo sin fronteras por la dignidad humana de las personas en movilidad humana. No podemos ni debemos permitir que la indiferencia o la inacción sigan siendo las respuestas frente a las tragedias humanas que enfrentan millones de personas migrantes y desplazadas. IR