Tegucigalpa – En vista que nadie estaba dispuesta a seguir acompañándola y por el temor, la madre del joven que era velado en una humilde vivienda de la colonia Mirador de Oriente donde sujetos irrumpieron y mataron a cinco personas e hirieron a otros cuatro, decidió trasladar el féretro hasta un campo de ese sector.

Tras ocurrir la matanza todo mundo abandonó la casa y dejaron el féretro solo y fue hasta esta mañana que la madre del difunto llegó a la dantesca escena donde alrededor del ataúd se observan las manchas de sangre en el piso.

La madre relató que fue más de una docena de sicarios los que ingresaron al velorio y comenzaron a disparar contra los asistentes y tras ocurrido el hecho todo mundo incluso ella abandonaron el lugar.

Indicó que cuando reclamó el cadáver de su hijo Edgar Iván Ramírez Cerrato quien fue asesinado la madrugada del lunes en la misma vivienda donde era velado, pidió a las autoridades que le brindaran protección, pero no lo hicieron argumentando que no eran guardias privados y ahora el resultado es que hay cinco jóvenes muertos y cuatro heridos.

Relató que los malhechores despojaron a todos los asistentes al velorio de sus teléfonos celulares para que nadie pudiera reportar el múltiple crimen a las autoridades.

En la balacera hasta un perro resultó con un rosón de bala y fue el único ser que se quedó en la casa acompañando al féretro.

Al regresar esta mañana a su casa, la madre quien el tiroteo también perdió a su cuñado, por recomendación de vecinos, decidió sacar el féretro de la vivienda y con la ayuda de buenos pobladores de ese sector llevaron el cajón hasta un campo de fútbol en la parte alta de la colonia.

Esta mañana no había presencia policial ni militar en el lugar donde ocurrió la masacre.