Miami, (EEUU) – El presidente norteamericano Barak Obama mostró en la convención demócrata de Filadelfia todo su apoyo a la candidatura presidencial de Hillary Clinton y advirtió de los peligros de que Donald Trump, el aspirante republicano, llegara a la Casa Blanca.
Obama, el primer presidente norteamericano en participar de una manera muy activa a favor de un candidato de su partido, dijo que podría decir, “con toda la convicción, que nunca ha habido un hombre o una mujer más cualificada que Hillary Clinton para ser presidente de Estados Unidos”.
“Hillary Clinton está únicamente preparada para estar en la Oficina Oval de la Casa Blanca”, dijo Obama, en un discurso que posiblemente sea el más importante que pronuncie antes que entregue el poder en enero próximo.
Hillary Clinton, la primera mujer en la historia de Estados Unidos en ser candidata presidencial, cerrará la convención el jueves en la noche al aceptar la nominación de su partido para las elecciones del 8 de noviembre.
Obama no tuvo reparos en elogiar al máximo a la que fue su Secretaria de Estado en su primer mandato presidencial, a pesar que ambos fueron rivales en una agresiva contienda electoral en 2008 en las primarias demócratas, que ganó el entonces joven senador por Illinois.
El vigoroso discurso de Obama no solo era para apoyar públicamente a Hillary Clinton, sino también para defender su legado de ocho años en la Casa Blanca y asegurarse que uno de su Partido Demócrata lo va a continuar y no desmantelarlo, como Trump ha prometido hacerlo.
Un triunfo de la ex Secretaria de Estado en las elecciones presidenciales de noviembre podría significar que quedaría prácticamente intacto el legado de Obama, logrado en dos mandatos, de cuatro años cada uno.
Sin embargo, Trump, como ya lo ha advertido, eliminaría muchas de las leyes que llevan la marca Obama, especialmente la reforma sanitaria, conocida popularmente como “Obamacare”.
Antes de Obama, habló a los delegados de la convención el senador por Virginia Tim Kaine, candidato a la vicepresidencia, quien introdujo varias frases en español, que recordó haber aprendido en Honduras como voluntario en 1980, en una escuela jesuita vocacional-técnica en la ciudad de El Progreso.
La intervención de Obama se produjo en el tercer día de la convención, tras el emotivo discurso del ex presidente Bill Clinton el martes, quien trató de humanizar la figura de su esposa, contando anécdotas hasta ahora desconocidas de su noviazgo y el trabajo de ella, “incansable por la justicia social a favor de los menos favorecidos”.
Bill Clinton, físicamente muy delgado, dijo que la conoció en 1971 cuando eran ambos estudiantes de leyes en la Universidad de Yale y que cuando se hicieron novios, ella rechazó por dos veces su oferta de matrimonio, hasta que a la tercera fue la vencida.
“Ella nunca deja de creer en uno, nunca renunció a mí”, dijo el ex presidente, en una clara referencia a los momentos difíciles, especialmente en el escándalo suscitado cuando se descubrió, en 1998, que había tenido sexo oral con una becaria de la Casa Blanca, Mónica Lewinsky.
La prensa publica hoy comentarios de muchos televidentes que apreciaron que las manos de Bill Clinton, de 69 años de edad, temblaban con frecuencia, pero él en una entrevista anterior dijo que los médicos le habían descartado que pudiera padecer el mal de Parkinson.
En caso que Hillary Clinton gane las elecciones de noviembre frente a Trump, es un tema de especulaciones de la prensa de este país el papel que va a desempañar su esposo en la Casa Blanca.
Los peores presagios indican que será más que un “súper vicepresidente”, opacando la figura del vicepresidente, Tim Kaine, de 58 años, quien se especula que estará esperando su mejor momento para las elecciones presidenciales del 2024.
Además del discurso de Bill Clinton en el segundo día, un momento estelar fue cuando las actrices Lena Dunham y América Ferrera (estrella de la serie de televisión “Ugly Betty”), pidieron el voto a favor de Hillary Clinton y la segunda reconoció que era hija orgullosa de un modesto inmigrante hondureño.
La convención demócrata ha logrado la calma tras el caos provocado el primer día por los seguidores de Bernie Sanders, indignados por las revelaciones de que los directivos del Partido Demócrata conspiraron contra el senador socialista para favorecer a Hillary Clinton en las primarias, según revelaron los documentos filtrados por “Wikileaks”.
El gobierno del presidente Obama tiene serias sospechas que los servicios de espionaje de Rusia han filtrados los correos electrónicos privados del Partido Demócrata, pero no quieren acusar formalmente al Kremlin, el centro del poder ruso, para no torpedear las negociaciones que se llevan a cabo para unificar la guerra contra el Estado Islámico en Siria, según el “The New York Times.
