Tegucigalpa – El Secretario Ejecutivo del Foro Nacional de Convergencia (Fonac), recomendó que viviendas y edificios a cargo de la Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI), deben ser utilizados para convertirse en unidades de tratamiento a pacientes con COVID-19, y también ser usados para atender la demanda de espacios de descanso al personal que labora en el sistema sanitario nacional, del mismo modo, muchos edificio públicos, deberían ser considerados para ese mismo fin”.
Rivera hizo un llamado enérgico a las autoridades para evitar que nadie sea discriminado por estar en riesgo de padecer coronavirus o estar contagiado del mismo; se debe sancionar a quienes actúen de forma arbitraria.
Para el dirigente de la sociedad civil, los hoteles deben ser habilitados para atender necesidades de médicos y enfermas que requieren descanso justo en el marco de la lucha que libran contra la pandemia del coronavirus en Honduras.
“Sabemos que Gobierno de la República ha iniciado gestiones al respecto, pero aún existen obstáculos que impiden convertir esto en una generalizada realidad; al respecto, los propietarios, ejecutivos y empleados de hoteles deben estar en la disposición de atender personal médico y de enfermería que se hospede en estos establecimientos, sin discriminación alguna, tomando -como es debido- las pertinentes medidas bioseguridad”, dijo.
Rivera Pacheco, expresó que, además de garantizarse al personal de los hospitales todo el equipamiento y materiales para la adecuada prestación de los servicios de salud, hay que buscar una manera de facilitarle espacios físicos en los cuales puedan reponer fuerzas; es decir, aprovisionarles un lugar seguro donde descansar para seguir luchando contra coronavirus”.
“Ellos ponen en riesgo sus vidas por el riesgo al contagio, pero también, ponen en riesgo la vida de sus familiares; hay que brindarle el apoyo requerido”, señaló.
Finalmente, Rivera hizo un llamado enérgico a las autoridades para evitar que nadie sea discriminado por estar en riesgo de padecer COVID-19 o estar contagiado del mismo, y sancionar a quienes actúen de forma arbitraria; Gobierno de la República y otros entes del Estado, deben tomar decisiones al respecto. “Ni los pacientes, ni los sospechosos de estar padeciendo de la enfermedad, ni el personal médico y de enfermería que arriesga su vida de forma cotidiana, deben ser sometidos a discriminación y agresiones; esto es inadmisible y se les debe brindar el respaldo del caso y defender sus derechos”.
