spot_img

Un planeta de diamante sólido

Por:

Compartir esta noticia:

No muy cerca de la Tierra (cuarenta años de distancia viajando a la velocidad luz) han descubierto un planeta compuesto casi en su totalidad de diamante. Donde nosotros tenemos rocas, ahí hay diamante, en lugar de agua, diamante, en vez de plantas diamante y, para abrir más el apetito, es dos veces el tamaño de la Tierra.

Creo que el sueño de la mayoría de nosotros sería poder viajar para traer toneladas y toneladas de diamantes. Lamentablemente estamos muy lejos en tecnología como para siquiera pensar en semejante jornada. Quizá algún día muy, muy lejano, mas no por ahora.

Pero, supongamos que en vez de vivir en la Tierra, fuéramos habitantes de ese planeta diamantino, seríamos todos ricos?

Pensémoslo bien. Lo que hace caros los diamantes en la Tierra es que no son muy abundantes. Es lo escaso –y su belleza- lo que eleva su precio. Si fueran tan abundantes como las rocas o la arena valdrían muy poco o nada.

En Japón hace muchos años por razones muy particulares, las rocas eran muy escasas y los ricos pagaban grandes cantidades por ellas para utilizarlas como inversión o adornos de lujo. Después, con el cambio de ciertas circunstancias y, como era lógico, su valor quedó –literalmente- en el suelo.

Si nosotros viviéramos en ese planeta de diamante posiblemente pasaríamos añorando agua,  piedras, tierra y arena y deseando tener una nave para venir a llevar un poco hacia allá.

Pensaríamos que   en la Tierra todos son ricos porque aquí abundan esos elementos y materiales, tal como ahí los diamantes.

Tenemos la tendencia a despreciar lo que nos abunda y codiciar lo que no tenemos, así somos los humanos.

Nuestro planeta está lleno de vida. Plantas maravillosas que luchan por sobrevivir al hombre, a su contaminación y a la sed insaciable de convertirlas en leña.

Tenemos agua, indispensable para la vida, nuestra vida! No obstante la contaminamos con químicos y basura, como si no dependiéramos de ella.

Y, más que todo eso, cada uno de nosotros tiene una vida, única, insustituible, la que algunos desperdician bebiendo, drogándose y engordando como cerdos. Nuestro cerebro es más complejo y perfecto que cualquier computadora, pero preferimos llenarlo de telenovelas, videojuegos y cierta clase de información, el equivalente de la basura con que contaminamos los mares.

Qué hacemos con nuestra vida? Nos matamos entre nosotros en guerras estúpidas y parece que mucho de lo que hacemos es buscando la autodestrucción.

Frecuentemente vemos noticias sobre personas que deciden terminar con su vida suicidándose. Aunque sin duda los problemas que los llevan ahí parecen no tener solución para ellos, creo que son demasiado impacientes, al final todos vamos a morir, cuál es la prisa?

Mientras eso sucede hay otros que luchan contra enfermedades terribles. Son combatientes que se aferran a la vida.

Unos prefieren morir autodestruyéndose mientras otros luchan por sobrevivir.

Existen médicos y voluntarios que viajan a lugares inhóspitos y arriesgan su vida para llevar un poco de salud y esperanza a completos desconocidos. Pero también hay soldados mercenarios que adoptan causas estúpidas y llevan muerte, también a desconocidos.

Hay misioneros que se adentran en selvas salvajes para ayudar a tribus primitivas, otros se amarran bombas en su cuerpo y matan mujeres y niños en las calles de ciudades supuestamente civilizadas.

A unos le sobra tierra, a otros les sobran diamantes, así somos.

spot_img
spot_img

Lo + Nuevo

spot_img
spot_img
spot_img
spot_imgspot_img