La violencia, la delincuencia, los pleitos políticos, la precaria economía familiar, los altos costos de la energía eléctrica, la peculiar forma de gobernar del presidente, Manuel Zelaya, marcaron el día a día del año que está por concluir en Honduras.

2008 se va dejando a los hondureños los mismos índices de pobreza, violencia, delincuencia, desigualdad social, bajos niveles educativos y de salud, que la ponen en la lista de los países más pobres del continente americano.

Seguramente los hondureños no olvidarán fácilmente un año en el cual los precios de los combustibles tocaron –tanto en el mercado internacional como nacional - precios récord a la alza y a la baja; un año en el que la violencia común cegó la vida a decenas de sus compatriotas, la mayoría de ellos jóvenes, adolescentes, gente común, pero también diputados, políticos, empresarios, abogados y mujeres, decenas de mujeres víctimas de la violencia machista; un año en el que resurgió con fuerza la mal llamada industria del secuestro, un año en el cual siete hombres murieron combatiendo un incendio forestal en las afueras de Tegucigalpa.

El gobernante hondureño –y sus más cercanos colaboradores- también pusieron su poco de sal y pimienta al deplorable ambiente social y político en que se debate día a día la población.

Como olvidar un hecho sin precedentes en la historia política nacional protagonizado por un canciller de la república que se enfrenta a miembros de la Policía Nacional que le detuvieron cuando circulaba por una calle de la capital hondureña en estado de ebriedad, y que pocos meses después fue el protagonista principal de un bochornoso hecho con la Policía de Miami, que le detuvo en una calle de aquella ciudad, junto a una jovencita, en estado de embriaguez.

Tampoco le será fácil a los hondureños borrar de su memoria el sangriento mes de marzo, en el cual se registraron una serie de masacres que enlutaron a decenas de familias hondureñas; las constantes muertes y asesinatos en el precario sistema penitenciario del país y las decenas de personas que perdieron la vida en un accidente vial.

Precisamente, un accidente vial cobró la vida de al menos 27 humildes campesinos que se transportaban en un bus chatarra que por fallas mecánicas se precipitó a un abismo en el sector conocido como “El vuelo del Ángel” en el sector de Jesús de Otoro, Intibucá (occidente).

ç Mayo de 2008 también será imborrable de la memoria de los hondureños, por ser el mes en que un avión de la línea aérea salvadoreña TACA se salió de la pista del aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa, causando la muerte de cinco personas, entre ellas el presidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), Harry Brautigam, y dos jóvenes que circulaban en el vehículo al que cayó encima la aeronave.

Tampoco será fácil olvidar el manejo político que hizo la presidencia de la República de este caso, tras ordenar el cierre por un mes del aeropuerto a vuelos internacionales y anunciar su intención de convertir la pista aérea de Palmerola, ocupada desde la década de los años 80 del siglo XX, por tropas estadounidenses.

Tampoco se podrán olvidar fácilmente los virulentos ataques del presidente Zelaya a la prensa y los periodistas que en su opinión desinforman al pueblo al no dar a conocer las ejecutorias de su gobierno, y a los “grupos de poder fáctico” que nunca identificó, pero que culpa de ser los responsables del atraso y la pobreza del país, así como su férrea lucha por aplicar en el país el “Hoy no circula”.

De amplia recordación será también la llegada al país en el mes de agosto del conflictivo presidente de Venezuela, Hugo Chávez, para firmar la adhesión de Honduras a la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA); los enfrentamientos verbales de Zelaya con el entonces embajador de Estados Unidos en Honduras, Charles Ford; y la incondicional amistad del gobernante hondureño con Daniel Ortega.

Las constantes huelgas de los docentes del sistema público de enseñanza en demanda de salarios y el cumplimiento del Estatuto del Docente, y de las enfermeras, los médicos y los estudiantes de Medicina de la Universidad Nacional en demanda de la abolición de un convenio violatorio de la Constitución según dictamen de la Procuraduría General de la República que permite a los estudiantes de la Universidad Católica hacer sus prácticas en los hospitales del estado.

Este anuario no estaría completo si se deja de lado la entrada en vigor de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública , un instrumento indispensable para llevar adelante la débil lucha contra el cáncer de la corrupción, y la huelga de hambre iniciada por cuatro fiscales del Ministerio Público en demanda de la correcta aplicación de la justicia en el país.

Tampoco debe faltar en este recordatorio el manoseo de los políticos a la Constitución de la República para adecuarla a sus intereses personales y de grupo, como ser los manoseos que los políticos hicieron de las leyes del país para evitar su inscripción, como ser la abolición de la figura de la vicepresidencia de la República para volver a la de tres designados presidenciales.

Estarán por siempre en la mente de los hondureños las imágenes del vicepresidente Elvin Santos y sus más cercanos seguidores forzando las entradas al Poder Legislativo para presentar la renuncia al cargo, días después de que el TSE decidió rechazar su inscripción alegando que la misma era inconstitucional.

En el campo deportivo nunca se olvidará la sufrida clasificación de la selección de Honduras a la hexagonal final rumbo al mundial de Sudáfrica 2010 y la inclusión del ex seleccionado nacional hondureño Héctor “Pecho de Aguila” Zelaya en la lista de los 1,000 mejores futbolistas de la historia del fútbol mundial.

En el campo internacional, la elección del negro Barack Obama como presidente de los Estados Unidos pasará a ser quizá el principal evento del año. Tampoco se olvidará fácilmente la liberación en Colombia de la ex rehén de las FARC, Ingrid Betancourt.

Y para que nuestros lectores puedan refrescar esos momentos importantes de la historia de Honduras en este año que está por concluir, ponemos a su disposición un resumen de las principales notas recogidas por Proceso Digital a lo largo de este interesante año.