* Rechazaron su cable sobre Honduras y reiteran su petición de que renuncie de su cargo diplomático
* El representante Connie Mack señaló al diario legislativo The Hill que Llorens «era parte del problema, no de la solución»
La anterior declaración fue divulgada por The Hill, el periódico referente en temas de interés para y acerca del Congreso de los Estados Unidos, con un enfoque especial sobre las empresas, grupos, campañas políticas y otros eventos en el Capitolio.
«Sí yo tengo la fortuna de convertirme en presidente de la comisión, vamos a seguir indagando las acciones del embajador en Honduras. No creo que él haya jugado el papel que le corresponde. El embajador no debería haber estado en el terreno tratando de manipular el resultado «, dijo Mack a The Hill.
Connie Mack es uno de los nombres que más se mencionan para ocupar la presidencia del subcomité del Hemisferio Occidental de la cámara baja. Para este republicano de La Florida, Llorens era «parte del problema, no la solución. «
La probable designación de Mack en el sub comité de la Cámara del Hemisferio Occidental es uno de los temas que ha apresurado la intención de sectores de la administración de Barack Obama que buscan el retorno del ex presidente Manuel Zelaya al país y que han actuado para que el hecho ocurra antes de la presunta asunción del republicano, dijeron a Proceso Digital expertos en política hondureña.
La publicación, que hace un contraste de opiniones relacionadas al informe de Llorens divulgado por WikiLeaks, indica posiciones moderadas como la del representante Elliot Engel (demócrata por Nueva York). En el próximo Congreso, Engel será probablemente el miembro de mayor rango en el subcomité del Hemisferio Occidental de la Cámara de Representantes, que tiene jurisdicción sobre Honduras, indica la publicación.
También incluye posiciones opuestas como la de Sarah Stephens, directora ejecutiva del Centro para la Democracia en las Américas, quien testificó ante el Congreso el año pasado sobre la salida de Zelaya.
«El cable (informe Llorens) confirma lo que hemos creído desde el principio – que se trataba de un golpe de Estado, que era inconstitucional, y que ha ayudado a socavar el imperio de la ley, los derechos políticos y humanos en Honduras, con problemas que persisten hasta hoy en día», dijo Stephens.
El tema ha puesto nuevamente en el tapete de los cabildeos de Washington a Honduras y su endeble democracia.
Esta semana el secretario adjunto para América Latina, Arturo Valenzuela, se reunió con el presidente Porfirio Lobo en Tegucigalpa. El gobernante dijo que entre otros temas se dialogó sobre las filtraciones de Wikileaks y sobre el retorno de Zelaya al país.
Lobo ha dicho que busca una salida para que el ex presidente regrese al país sin que tenga que ir a la cárcel. El ex gobernante, tiene cargos en los tribunales de justicia ligados a presuntos actos de corrupción.
Pero Zelaya rehusa cada propuesta que surge en torno a su regreso a Tegucigalpa y la última fue una carta conocida el martes donde niega a cualquier persona que negocie en su nombre.
En los últimos días se ha mencionado que tanto la Fiscalía como la Corte Suprema de Justicia buscan una salida para que Zelaya retorne al país sin comparecer ante la justicia, este extremo no ha sido confirmado por los titulares de ambos órganos.
A continuación Proceso Digital publica una traducción libre de la información dada a conocer por The Hill y en la que se denota que Honduras recobra importancia en la política estadounidense:
Cable filtrado reabre el debate sobre Honduras Kevin Bogardus THE HILL
Un cable del Departamento de Estado publicado por Wikileaks ha reabierto el debate en Washington sobre el derrocamiento del año pasado del entonces presidente hondureño Manuel Zelaya. El cable filtrado de julio 2009, firmado por el embajador de EE.UU. en Honduras, Hugo Llorens, señalaba que la destitución de Zelaya por los militares hondureños «constituye un golpe de Estado ilegal e inconstitucional.» En lenguaje muy franco, el cable desmonta los argumentos de los defensores del derrocamiento de Zelaya, llamándolos mentiras o suposiciones. El cable ha atraído la atención de los críticos del gobierno de Obama tanto en la derecha como en la izquierda. Por ejemplo, el cable ha desatado una nueva ronda de apreciaciones del probable próximo presidente del subcomité de la Cámara del Hemisferio Occidental, el representante Connie Mack (Republicano-Florida), quien dijo que Llorens era «parte del problema, no la solución. « «Si yo tengo la fortuna de convertirme en presidente de la comisión, vamos a seguir indagando las acciones del embajador en Honduras. No creo que él haya jugado el papel que le corresponde. El embajador no debería haber estado en el terreno tratando de manipular el resultado «, dijo Mack al periódico The Hill. Mack y otros republicanos han dicho que la remoción de Zelaya se produjo a partir de su intento de retener el poder. Aunque Zelaya fue enviado a la vecina Costa Rica en medio de la noche por soldados hondureños, los legisladores republicanos se han negado a llamar a su derrocamiento un golpe de Estado. Dicen que los hondureños decidieron remover a Zelaya a través de las acciones de los poderes legislativo y judicial de su gobierno. «Ninguna persona seria puede llamar a esto un golpe de Estado militar. Es falso «, dijo Mack. Otros han estado en desacuerdo, citando el cable filtrado como una confirmación más de que el derrocamiento del presidente de Honduras fue un golpe de Estado ilegal. Sarah Stephens, directora ejecutiva del Centro para la Democracia en las Américas, un think tank liberal, testificó ante el Congreso el año pasado sobre el derrocamiento de Zelaya. «El cable confirma lo que hemos creído desde el principio – que se trataba de un golpe de Estado, que era inconstitucional, y que ha ayudado a socavar el imperio de la ley, los derechos políticos y humanos en Honduras, con problemas que persisten hasta hoy en día», dijo Stephens. También dijo que la administración Obama se ha distanciado de su posición original en la remoción de Zelaya. «La comunicación en el cable es bastante clara en cuanto a la posición inicial adoptada por la administración, y es igualmente claro que con el tiempo la posición del gobierno de Obama sobre Honduras se ha desviado más y más del análisis que en él figura», dijo Stephens. «Dadas las condiciones sobre el terreno en Honduras, y teniendo en cuenta las repercusiones en la región, seguimos creyendo que una oposición constante contra el golpe de Estado era la postura correcta desde el principio y la administración debería haberse mantenido firme en el tiempo.» En junio de 2009, Zelaya fue depuesto por los militares hondureños cuando se dijo que quería eliminar los límites del mandato de la Presidencia para permanecer en el poder. Zelaya ha negado esas acusaciones. Zelaya no fue restituido al poder para terminar su mandato, y ahora se ha exiliado en República Dominicana. Honduras celebró elecciones en noviembre de 2009 en las que Porfirio Lobo fue electo presidente. El presidente Obama inicialmente calificó el derrocamiento de Zelaya como » ilegal» y dijo que constituiría un «terrible precedente» para la región, transmitiendo un discurso similar al del cable de filtrado. Pero más tarde el gobierno de EE.UU. reconoció las elecciones de Honduras el año pasado pese a los llamamientos a la administración para no hacerlo debido a la controversia sobre la destitución de Zelaya. Aunque este enfoque fue criticado por algunos en la izquierda, ha ganado los elogios de un miembro clave de la Cámara: el representante Eliot Engel (demócrata por Nueva York). En el próximo Congreso, Engel será probablemente el miembro de mayor rango del subcomité de la Cámara del Hemisferio Occidental, que tiene jurisdicción sobre Honduras. Calificándolo como un «trabajo magistral», Engel dijo que la administración Obama asumió un enfoque pragmático «, a medio camino» la posición que se coloca entre ambas facciones del Capitolio. «Los republicanos estaban molestos al principio por que la administración lo denominara golpe de Estado y los Demócratas estaban molestos al final – no todos, pero algunos – por que se reconocieron las elecciones», dijo Engel. «Creo que lo que hicimos mantiene la influencia de los Estados Unidos viva, de una manera positiva en esa zona.» La nación centroamericana tiene ahora su propia representación en Washington para manejar sus relaciones con los legisladores. Honduras ha contratado recientemente a la firma de abogados Lanny J. Davis%26nbsp; Associates, dirigida por el ex consejero de la Casa durante el gobierno de Clinton, Lanny Davis. Según Davis, al gobierno de Honduras le gustaría pasar página en el tema del cable filtrado en relación al derrocamiento de Zelaya. «No haremos comentarios en torno al análisis hecho en el pasado por el Embajador. Los hechos hablan por sí mismos «, dijo Davis. «Es hora de mirar hacia el futuro, no el pasado. Honduras es y ha sido un fiel aliado de los EE.UU. y una democracia constitucional, que funciona con distintas ramas de gobierno bajo el imperio de la ley. « Mientras tanto, la administración Obama tendrá que lidiar con la nueva Cámara republicana el próximo año. En su entrevista con The Hill, Mack reiteró sus llamamientos anteriores para que Llorens dimita. El republicano de la Florida, dijo que era demasiado pronto para pedir audiencias sobre en la próxima sesión del Congreso, pero aseguró que lo ocurrido estará en su agenda del próximo año. «Tendremos que ver. Me gustaría que hicieramos una nueva audiencia «, dijo Mack. |
