La presidenta del Tribunal, Morelia Ríos, dijo a periodistas que, a petición del Ministerio Público (Fiscalía) y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), se reprogramaron las audiencias para celebrarse del 7 al 11 de febrero próximo.
Según Ríos, la Fiscalía y la CICIG pidieron esa reprogramación debido a que la mayoría de testigos que ellos presentarán en el juicio oral y público se encuentran fuera de Guatemala.
El juicio contra Portillo y sus exministros de Defensa y Finanzas, Eduardo Arévalo y Manuel Maza, respectivamente, se inició el pasado viernes tras una larga batalla legal de sus abogados que pretendían aplazar el comienzo del debate.
El expresidente y sus dos exministros son acusados por la Fiscalía y la CICIG de la malversación de 120 millones de quetzales (15 millones de dólares) del erario guatemalteco.
Durante la audiencia de ayer, lunes, tanto Portillo con Arévalo y Maza se abstuvieron de declarar ante el tribunal.
Portillo fue detenido en enero pasado, a petición de los Estados Unidos, que le reclama en extradición por el delito de conspiración para el lavado de dinero por un monto de 70 millones de dólares.
Esa captura hizo que se le revocara la fianza de 120.000 dólares que había pagado en 2008 para quedar en libertad por el delito de peculado por el que fue extraditado de México y por el que es juzgado en el Tribunal Undécimo.
El dinero malversado habría ido a parar a las cuentas personales de los exfuncionarios, así como a estructuras criminales integradas en su mayoría por antiguos exmilitares y dedicadas a diversas actividades ilícitas, según la investigación de la Fiscalía.
Para demostrar la culpabilidad de los procesados, la Fiscalía y la CICIG presentarán durante el juicio más de 700 pruebas documentales y la declaración de 36 personas, entre peritos especializados y testigos de cargo y descargo.
