Detalló que cada 1% de energía perdida representa 150 millones de lempiras.
Precisó que la ENEE ya ha perdido más del 23% por lo que se han sobrepasado los 2,700 millones de lempiras.
En ese sentido, Aguilar indicó que la ENEE está obligada a hacer operativos para buscar a los consumidores que se están hurtando la energía, así como a crear un plan correctivo de pérdidas.
Lamentó que los operativos no están resultando efectivos porque todavía hace falta comprar medidores para que sustituyan los que están modificados en los lugares donde hurtan electricidad.
Aseguró que la única forma de evitar las pérdidas es invirtiendo en equipo de alta tecnología.