Washington – El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, insistió hoy en que China está tratando de interferir en las elecciones legislativas del próximo mes en este país, y consideró que «lo que están haciendo los rusos palidece en comparación» con la injerencia china en el sistema político del país norteamericano.
«El liderazgo del presidente (Donald) Trump está funcionando, y China quiere que haya otro presidente estadounidense», dijo Pence en un discurso sobre Pekín en el centro de estudios Hudson Institute.
Pence acusó a China de centrar sus aranceles en «las industrias y estados que tendrán un papel importante» en las elecciones legislativas de noviembre próximo, y de intentar «que los votantes» de Trump «se vuelvan en contra» de su Gobierno.
EE.UU. y China mantienen una guerra comercial desde julio, cuando Trump impuso aranceles a las importaciones chinas del sector tecnológico y Pekín respondió con medidas análogas que afectan principalmente a bienes agrícolas como la soja, que se cultiva en estados rurales que en su mayoría votaron en 2016 por Trump.
«China ha movilizado actores y grupos encubiertos y medios de propaganda para cambiar la percepción de los estadounidenses sobre las políticas chinas. Como me dijo recientemente un alto cargo de nuestras agencias de inteligencia, lo que están haciendo los rusos palidece en comparación con lo que está haciendo China», indicó.
«Pero nuestro mensaje a los líderes de China es este: este presidente no se detendrá, y el pueblo estadounidense no se dejará influir. Seguiremos defendiendo nuestra seguridad y economía», subrayó.
La semana pasada, Trump acusó a China de manipular los comicios legislativos del 6 de noviembre, porque, según aseguró, «no quieren» que los republicanos mantengan el control del Congreso.
El ministro chino de Exteriores, Wang Yi, negó entonces que Pekín haya interferido en el sistema político estadounidense, y tachó la acusación de «injustificada».
Trump no aportó la semana pasada pruebas que demuestren su acusación, más allá de citar un anuncio en un diario de Iowa que responsabilizaba al mandatario estadounidense de los aranceles chinos a productos agrícolas.
Pence fue hoy más allá al alegar que «altos funcionarios chinos han tratado de influir en líderes de negocios para que condenen» la guerra comercial de Trump, pero tampoco proporcionó pruebas de ello.
