Tegucigalpa – Acuerpados por la Asociación Nacional de Enfermeras y Enfermeros de Honduras (Aneeah), los empleados del hospital siquiátrico de agudos Mario Mendoza, paralizaron las actividades este martes, arguyendo falta de seguridad ya que la semana pasado un privado de libertad que estaba interno en ese nosocomio mató a otro paciente.
El presidente de la Aneeah, Josué Orellana, indicó que la muerte de un paciente la semana pasada fue el detonante para que esta mañana los empleados hayan decidido declararse en asambleas informativas de forma indefinida iniciando por el turno A.
“Nosotros esperamos que las autoridades por favor vuelvan sus ojos a este centro hospitalario, aquí hubo la muerte de un paciente y ha pasado desapercibido totalmente y lo que los compañeros están pidiendo es muy sencillo que las resoluciones que dictan los jueces vayan apegadas estrictamente a lo que establece un siquiatra”, argumentó.
Agregó que llegan pacientes mediante una resolución de un juez que ordena que un privado de libertad esté recluido por seis meses y a veces el médico le da de alta a los tres meses, pero debe continuar ingresado por esa resolución.
En ese sentido, los jueces están utilizando el hospital como un centro de reclusión y no como un centro de hospitalización para una pronta recuperación del paciente.
En resumen, los empleados piden que se resuelva la situación de los pacientes y que se le dé la potestad a los siquiatras de decidir el tiempo de hospitalización al momento de ser ingresado y también demandan la contratación de más recurso humano en vista que hay una sobrecarga de trabajo.
Indicó que actualmente hay 17 privados de libertad internos en ese centro asistencial e incluso hay personas acusadas por violencia intrafamiliar y eso tiene incomodos a los empleados ya que los pacientes y ellos mismos corren peligro.
Orellana aclaró que la consulta externa no se va a atender este día, solamente se hará en las áreas críticas y están pidiendo una reunión con el nuevo ministro de Salud, Octavio Sánchez.
Los manifestantes también denunciaron irregularidades administrativas y la falta de medicamentos e insumos en ese centro hospitalario.
