Panamá – Panamá sumó este viernes 642 nuevos casos de la COVID-19 y 18 muertes más, que hacen un total de 90,624 contagios confirmados y 1,966 decesos por la enfermedad en 174 días de pandemia, informaron las autoridades sanitarias.
El reporte del Ministerio de Salud (Minsa) contabilizó 1,500 hospitalizados, 154 en unidades de cuidados intensivos (UCI) y 1,346 en sala general, mientras que 21,131 personas están aisladas en sus casas y otras 425 en hoteles-hospitales.
En Panamá, desde que se dio el primer caso el 9 de marzo pasado, se han aplicado 326,597 pruebas de detección del coronavirus, 70 % negativas y 30 % positivas.
Los test por millón de habitantes alcanzan las 76,334, con 5,115 aplicadas en las últimas horas, que dan una positividad de 12.5 %.
La mayoría de fallecimientos de acuerdo con el rango de edad se mantiene entre las personas de entre 60 a 70 años (926) y mayores de 80 (487).
Una escalada de la pandemia que comenzó en junio pasado en Panamá, de 4,2 millones de habitantes, llegó a colocar al país como el segundo con más nuevos contagios por cada 1.000 en el continente, pero desde hace unas semanas las autoridades destacan una mejora en los indicadores pandémicos.
De mantenerse esa tendencia, se podrá avanzar en la implementación de un cronograma que establece entre el 7 de septiembre y el 12 de octubre la reapertura de casi el total de las actividades en el país, incluida la aviación internacional, la cual fue anunciada el martes pasado.
El ministro de Salud, Luis Francisco Sucre, dijo el jueves que la aplicación terapéutica de la hidroxicloroquina, que se retomó en el país el 13 de julio tras ser suspendida el 13 de junio, ha impactado en un «descenso significativo» en el fallecimiento de pacientes de la COVID-19.
La directora general de Salud del Minsa, Nadja Porcell, dijo este viernes por su parte que la reciente mejora de la situación epidemiológica es el resultado de un conjunto de factores.
Los contagios «disminuyen por el plan de trazabilidad que se viene implementando, el hisopado a todos los contactos del caso positivo, el poder llevarle todo a la casa de un contagiado para que pueda mantener la cuarentena», declaró Porcell.
Esta mejora de los indicadores pandémicos llevó a las autoridades a retomar la semana pasada la reactivación gradual de la golpeada economía, que este año caerá en 9 % de acuerdo con las previsiones oficiales.
