Luego de ser señalado de forma permanente por la Organización de Naciones Unidas (ONU) como el país más violento del mundo, fuera de las zonas de guerra, por registrar 20 muertes violentaras diarias y 85 homicidios por cada 100 mil habitantes, Honduras ya no es considerado como el país más violento, ni siquiera del continente americano, según el Índice Global de Paz 2013, publicado recientemente.
Sobre ese logro, Ayestas destacó que ese análisis es muy importante ya que luego de mucho tiempo, se hace ver a Honduras ya no como el país más violento del planeta.
Añadió que igualmente es importante resaltar el esfuerzo que el gobierno hondureño está haciendo en tratar de frenar y reducir los índices de violencia a fin de mejorar en el Índice Global de Paz.
Señaló que hay aspectos que Honduras no tiene, como en el caso de Colombia donde existe un conflicto armado que lo hace ver como un país sumamente violento y en Honduras a partir del año pasado se está viendo una reducción de los homicidios.
Ayestas señaló que el Índice Global de la Paz no solamente mide la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes, sino también los conflictos internos que hay en el país y las acciones que se empeñan los gobiernos en desarrollar.
En ese sentido, indicó que mucho de lo que se estableció en el informe, es que gran parte de la violencia generada en el país, es producto de la actividad del narcotráfico y no un problema de convivencia tal como lo expresa el Observatorio de la Violencia.
La violencia por relaciones interpersonales solamente representa un siete por ciento del total ya que en la gran mayoría es producida por el sicariato y los ajustes de cuenta producto del narcotráfico, explicó.
Atribuyó que en el progreso en el índice, se debe a los esfuerzos gubernamentales para ir reduciendo los espacios y territorios al narcotráfico y a las maras y pandillas así como un avance en la investigación y el hecho de que se castiguen más bandas criminales, ha hecho que se mande un mensaje a la población de que por fin, se está haciendo algo para frenar la delincuencia organizada y la común.
Precisó que se han creado unas 17 leyes encaminadas a combatir la criminalidad al tiempo que se han establecido fuerzas especializadas, sin embargo, las leyes por si solas tampoco disminuyen los homicidios, pero se han mandado un mensaje a la sociedad de que por fin el gobierno está tratando de instituir una cultura de paz en el país.
Destacó que es importante que el nuevo gobierno que asumirá el próximo año, de continuidad a esas acciones, porque el problema en el país, es que cada administración establece su propia estrategia de seguridad de acuerdo a sus asesores.
“Aquí debe haber una política integral de seguridad que trascienda más allá de un gobierno y que también potencie acciones como la prevención, rehabilitación y la reinserción porque el Índice Global de Paz también analiza a la población carcelaria donde hay muchos problemas por falta de condiciones adecuadas”, recomendó.
La funcionaria también resaltó la importancia de la depuración policial ya que después de todos los involucramientos en actividades delictivas como lo que aconteció con agentes de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) en San Pedro Sula, hace necesario que se haga una verdadera profilaxis en la Policía hondureña, efectiva y expedita, de lo contrario puede pensarse que es solamente una táctica dilatoria para no hacerlo.
El reporte publicado por el Institute for Economics Peace (IEP), bajo el nombre de “Vision Humanity”, es utilizado como fuente de consulta por organismos no gubernamentales y entes financieros internacionales, como el Banco Mundial (BM) y la misma ONU, entre otros.
Se informó que el índice es redactado tomando como base 22 indicadores de 162 naciones, entre los que destacan la expansión y el gasto militar, como también la población en las cárceles en base a la población general.
El índice del 2012 fue hecho en base a 158 naciones, pero al del 2013 se le agregaron cuatro más para sumar 162. Con todo, se mantiene la misma tendencia con Colombia como el país más violento del continente americano, seguido de México (segundo) y Honduras como tercero.
Según el informe, los tres países con mayor seguridad son Uruguay en el primer lugar, seguido por Chile y Costa Rica.
Las calificaciones recibidas, que son globales y no por continente, ubican a Colombia en la posición 147, México en la 133 y Honduras 123. Mientras los que tienen las tres mejores calificaciones: Uruguay está en el puesto 24, Chile en el 31 y Costa Rica en la casilla 40.
