Tegucigalpa – El párroco de la Iglesia Catedral de Tegucigalpa, Juan Carlos Martínez, en la homilía de este domingo, le pidió a los feligreses que no tengan un vacío en sus vidas y que no ambicionen a tener riquezas si no las comparten con las demás personas.
Al mismo tiempo remarcó que de nada sirve ganarse el mundo si se obra mal en la vida.
El líder católico inició explicando que todos deben negarse a sí mismo en la vida para tener plenitud y que eso significa que deben aceptar la liberación que trae Jesús y eso es liberarse de la mentira, el orgullo, la comodidad, el afán de lucro y poder.
“De le que sirve a un hombre ganar el mundo entero si mal obra su vida”, reflexionó Martínez.
Agregó que “la sociedad actual lo tiene todo, pero le falta lo esencial. Se vive en tensión, en ansiedad, aburrimiento o estrés y eso consume a unos pocos a una vida vacía y sin sentido”.
El párroco de la Catedral explicó que la vida vacía a juicio de sociólogos es el que se siente privado del sentido de la vida. “Cuando el hombre se siente vacío, la vida se convierte en una carrera al placer inmediato y hasta el mismo amor queda a un negocio interesado de dos que buscan llenar el vacío”, compartió.
Añadió que “estamos en una sociedad donde lo importante es obtenerlo todo y ahora mismo, un ambiente social que solo impulsan a ganar, gastar y disfrutar, cuando sistemáticamente vamos satisfacemos inmediatamente, luego viene el vacío y el decaimiento”.
Reiteró que no sirve de nada tener el mayor poder del mundo si se tiene una vida completamente vacía.
“De que nos sirve ganar el mundo entero, sino logramos realizarnos como personas. Para que sirve ambicionar riquezas y reconocimientos si olvidamos a los demás”, concluyó.
