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Multitudinario adiós para Berta Cáceres

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Tegucigalpa – Miles de personas despidieron el mediodía de este sábado a la asesinada ambientalista y líder indígena, Berta Cáceres, mediante una caravana multitudinaria en la ciudad de La Esperanza, Intibucá, occidente de Honduras.

– El sol no asomó este sábado en La Esperanza. Un “mar de personas” despidió a su connotada dirigente indígena.

Las calles resultaron insuficientes para albergar a los que llegaron de todas partes del país para rendirle un tributo a la cofundadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh).

Al grito de “justicia, justicia, justicia…”, millares de asistentes recorrieron las calles principales de La Esperanza bajo un cielo nublado que presagiaba el dolor por la pérdida irreparable de la líder lenca.

El féretro de Cáceres se posó por varios minutos en el paseo turístico “La Gruta”, donde se leyeron varios acuerdos de duelo y se realizaron actos para despedirla de este mundo.

Familiares, amigos, defensores de derechos humanos y representantes de todos los sectores de la sociedad no perdieron la oportunidad para darle el último adiós a Bertita -como le decían cariñosamente-.

Cáceres denunció en varias ocasiones que era amenazada de muerte y que algunos de sus familiares también sufrían esta situación por defender los derechos del pueblo lenca que habita en el occidente de Honduras.

Además fue una férrea opositora a la construcción de represas hidroeléctricas que han pretendido empresas nacionales y extranjeras.

Hijos de Berta Cáceres exigen
investigación profesional

Antes del último adiós de la dirigente indígena, sus hijos: Olivia, Berta, Laura y Salvador en compañía de su matriarca, Austra Berta, leyeron un comunicado para exigir que se haga justicia bajo una investigación apegada a métodos científicos.

hijosBC“Nuestra Berta es la mayor de nuestras inspiraciones, por ello sentimos la necesidad de hacer escuchar la verdad acerca de su vida y de su lucha”, comenzó diciendo Olivia.

Los hijos de la malograda ambientalista agradecieron las muestras de solidaridad a nivel nacional e internacional y agregaron que la lucha continúa a favor del pueblo lenca.

Olivia Zúniga demandó que “no se puede distorsionar la verdad acerca del crimen que terminó con su vida, sabemos con certera claridad que su vil asesinato fueron su resistencia y lucha en contra de la explotación de los bienes comunes, de la naturaleza y en defensa del pueblo lenca”.

Continuó que el crimen contra su madre “es un intento por cortar la construcción de un nuevo mundo”.

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