Tegucigalpa – El presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Juan Carlos Sikaffy, aseveró que los países centroamericanos deben unirse para reconstruir el área y levantar la productividad ante los daños causados por las tormentas Eta e Iota.
“La unión con los demás países centroamericanos es urgente, creo que tenemos que hacer un bloque para poder levantar la productividad del país y la reconstrucción de todas las vías que se perdieron”, declaró Sikaffy a la emisora Radio América.
Argumentó que ni el gobierno ni las empresas tienen la capacidad de reconstruir el país, alegó que la única vía es la ayuda internacional.
Puntualizó que estos dos eventos ciclónicos provocaron pérdidas en la cadena alimenticia, sobre todo en Valle de Sula, que eran de los pocos sectores que no habían sido perjudicados por la pandemia.
Sikaffy recordó que antes de las tormentas, Honduras sufría un grave problema de la pérdida de empleos y los cierres de empresas.
El representante del sector privado priorizó la construcción de las represas Jicatuyo, Los Llanitos y El Tablón para mitigar las inundaciones en el Valle de Sula como la reconstrucción de los bordos y darles mantenimiento.
“Tenemos que empezar a observar las cosas antes que nos ocurran las desgracias como la construcción de represas y reservorios de agua para contener inundaciones es hoy más importante porque ya vimos los daños que ocasionan estos fenómenos naturales”, manifestó.
Expuso que las pérdidas económicas en el sector agro son incuantificables y que transcurrirán semanas para dar un reporte completo.
Toncontín debe seguir operando
Sikaffy afirmó que el aeropuerto de Toncontín debe de seguir operando con vuelos internacionales, arguyendo que la terminal ha estado funcionado después del paso de los fenómenos ciclónicos.
“Nosotros pedimos dejar abierto Toncontín porque es la alternativa más segura que tenemos en este momento”, justificó.
A su criterio, el aeropuerto de Tegucigalpa nunca debió ponerse en riesgo su operación, pero que tampoco debe atacarse la construcción de la terminal de Palmerola.
Salario mínimo
Asimismo, anunció que la siguiente semana, el sector privado sostendrá una reunión con los obreros y el ministro de Trabajo para analizar la situación del país y cuanto afectaría en la negociación del salario mínimo.
“La próxima semana tendremos reuniones con el ministro de Trabajo y los amigos obreros para conocer la situación del país debido que fue golpeado fuertemente”, comentó.
Estimó que un promedio de 800 mil empleos formales se perdieron con la pandemia.
Instó a los sectores obreros, empresarios y gobierno que deben dejar de lado los intereses particulares en las discusiones y pensar en beneficio de los hondureños.
“No creo que en este momento de darle una opinión del salario mínimo, pero estamos conscientes de la devastación que ha sufrido el país”, finalizó. (ag)
