Tegucigalpa – El Consejo Nacional de Inversiones (CNI), considera que un Plan de Reforma Integral del Sistema Eléctrico constituye el mecanismo oportuno para lograr mejorar la situación de insolvencia que registra la estatal eléctrica y permitirá reordenar el subsector eléctrico de Honduras.
Un servicio eléctrico accesible y eficiente es clave para promover un ambiente deseable para la inversión y la mejora en los niveles de competitividad de las empresas. Las deficiencias en la provisión de este servicio imponen costos importantes para el sector privado, el cual representa la mayor parte del consumo eléctrico nacional.
Según el CNI, la liberalización del subsector eléctrico permitirá aumentar la competitividad y lograr precios más justos para el consumidor final. Adicionalmente, la oportunidad de invertir en el subsector eléctrico en generación de energía renovable bajo condiciones competitivas y transparentes con miras a mejorar la eficiencia y disminuir las emisiones contaminantes como el dióxido de carbono coadyuva a la sostenibilidad ambiental.
Estudios de organismos internacionales de crédito han demostrado que el servicio eléctrico se considera como el segundo elemento más relevante para hacer negocios en Honduras, mientras que las pequeñas y medianas empresas (PYMES) reportan que los cortes de suministro y la mala calidad del servicio les generan pérdidas. Para mejorar el clima de negocios se considera de vital importancia continuar con cambios profundos en el subsector eléctrico.
Derivado de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el gobierno de Honduras, se ha definido como prioridad nacional el rescate financiero de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), un pilar fundamental para la sostenibilidad fiscal y mantenimiento de los niveles de competitividad de los sectores productivos y bienestar de la población en general. La sostenibilidad financiera de la institución conducirá a un menor endeudamiento público.
Igualmente, -cita el CNI- la reducción de pérdidas técnicas y no técnicas constituye un factor clave, lo cual se lograría mediante la mejora en el mecanismo de transmisión y distribución de energía, la recuperación de la mora y la medición justa y equitativa del consumo de energía.
Los retrasos en la ejecución de proyectos energéticos, procesos de licitación poco transparentes o inexistentes, compra de energía con altos costos, demoras en la ampliación de los proyectos de transmisión y distribución, y altos niveles de morosidad, han conducido a la insolvencia de la ENEE.
Es importante que La Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE) se consolide para que cumpla su papel de ente regulador del sector eléctrico. De lograrse el fortalecimiento de este ente, los niveles de confianza de los inversionistas aumentarán generando mayores oportunidades de empleo y crecimiento económico.
