Tegucigalpa – Un joven de la raza negra tomó la fatal decisión de suicidarse en las últimas horas al lanzarse desde la terraza de un edificio localizado en el centro de la capital hondureña, acto que fue captado por las cámaras de vigilancia del inmueble.
El hecho ocurrió en el antiguo Hotel Istmania, localizado en el barrio Los Dolores frente a donde funciona la Jefatura Metropolitana de la Policía Nacional conocida como Core-7.
El fallecido fue identificado como Ángel Leonel Cacho Molina de 18 años de edad, originario del municipio de Puerto Lempira, Gracias a Dios, quien fue captado por las cámaras de seguridad instaladas en el edificio cuando se subió a la azotea del inmueble de ocho pisos, unos 25 metros, y de cabeza se lanzó al vacío.
En su caída, Cacho Molina rebotó primero en el cableado eléctrico donde descargó la mayor fuerza y velocidad para luego estrellarse contra el duro asfalto.
Varias personas que presenciaron estupefactos el acto suicida, corrieron a prestarle auxilio a Cacho Molina quien tenía varios años de residir en el edificio y llamaron a la Cruz Roja Hondureña para trasladarlo a un centro asistencial ya que todavía daba señales de vida.
Tras ser trasladado a la sala de emergencias del Hospital Escuela Universitario (HEU), el joven finalmente falleció debido a los golpes que recibió al estrellarse contra el pavimento.
Según personal forense que hizo el levantamiento del cuerpo en el centro asistencial, el hecho de caer primero en los cables, le provocó a Cacho Molina una muerte lenta y dolorosa.
Asimismo, en la morgue capitalina se reportó el ingreso del cadáver de una jovencita de 17 años quien fue encontrada ahorcada con una soga atada al techo de la vivienda en que residía junto a su pareja.
La fallecida fue identificada como Evelyn Rubí Oseguera Sánchez, originaria y residente en el barrio Matasano de la aldea de Támara, Francisco Morazán.
No obstante, aunque la muerte de la jovencita es un aparente suicidio, las autoridades correspondientes está siendo objeto de investigación ya que según familiares, hay indicios de haber sido ultrajada y sospechan de la persona con la que hacía vida marital.
