Tegucigalpa – La jefa de bancada del Partido Innovación y Unidad Social Demócrata (Pinu-SD), Doris Gutiérrez, calificó de “indignante” y una “aberración” contra el pueblo hondureño, que desde el Congreso Nacional se pretenda convertir la vacuna contra el COVID 19 en una “mercancía”, con el firme propósito de favorecer a un grupo del sector privado del país.
La diputada exhortó al pueblo hondureño a exigir, de manera pacífica, que la vacuna contra el COVID 19, sea gratis, ya que la salud es responsabilidad del Estado.
Además, exigió que el decreto, que se pretende aprobar en el Congreso Nacional, en el que se autoriza a la empresa privada la distribución, aplicación o venta de la vacuna contra la COVID 19, sea retirado.
Cuestionó que ya es la cuarta vez que se pretende reformar, en el Congreso Nacional, la Ley de Vacuna Gratuita para Todos contra el COVID 19, ahora con el agregado de un ingrediente nuevo pero indignante como es permitir la venta y la comercialización de las vacunas para generar ingresos para el sector privado.
Esto pone en una situación realmente deprimente al Estado de Honduras que está demostrando su incapacidad para manejar esta pandemia y abandona su responsabilidad de velar por la vida y la salud de los hondureños como lo establece la Constitución, declaró.
Gutiérrez desautorizó a quienes hicieron público el documento y cuestionó que, aunque el dictamen orientado a autorizar a la empresa privada la compra y comercialización de las vacunas aparece favorable, ni siquiera fue discutido en la Comisión Especial de COVID 19.
Dicha Comisión de la que ella forma parte, también la integran los diputados Mario Alonso Pérez, Juan Diego Zelaya, Felicito Ávila, Mario Segura, Samuel Madrid, Karen Ortega, Zamir Molina, Obdulia Matute, Mario Noé Villafranca y Rolando Dubón.
No están autorizados para sacar mi nombre, como que estoy a favor de esa aberrante decisión que quieren poner como principal argumento para aliviar las finanzas del Estado, indicó.
Por qué no se preocuparon por aliviar las finanzas del Estado cuando desembolsaron, de un solo, 1,200 millones de lempiras por unos hospitales que ni siquiera están funcionando, se preguntó.
Debo dejar claro que ese dictamen no ha sido discutido y mucho menos firmado, los demás miembros de la comisión tendrán que decirlo, pero yo no he firmado ni votaré a favor de semejante aberración contra nuestro pueblo, señaló.
Recordó que el pasado lunes fueron convocados a una sesión de la Comisión Especial y luego la suspendieron.
Mi posición ha sido clara al respecto, estoy en contra de cualquier proceso de privatización y no digamos de la venta de vacunas contra el COVID-19, que las están convirtiendo en mercancía para que puedan ser compradas solo por las personas que tienen posibilidades económicas, dejando en la más absoluta indefensión a la mayoría del pueblo hondureño.
JS
