Tegucigalpa (Especial Proceso Digital) – Este lunes inicia el segundo mandato del presidente estadounidense Donald Trump, y a diferencia del primero (2017-2021), hoy los gobiernos y regiones se encuentran con expectativas, especialmente porque durante la transición ha agregado a los temas de la migración y lucha antidrogas, otros elementos que han provocado reacciones globales. Entre sus propuestas habla de anexar la isla de Groenlandia, pedir a Canadá que se integre a Estados Unidos como el estado 51 y amenaza a Panamá con reapropiarse del canal sí sigue cobrando tarifas altas a los navíos norteamericanos.
-A la amenaza de Xiomara Castro de cerrar Palmerola sí Trump deporta a decenas de miles de hondureños, reaccionó un representante con cancelar toda la asistencia a Honduras.
-La mandataria mexicana es una de las más presionadas y busca hacer frente a la nueva Casa Blanca escudándose en un bloque latinoamericano.
A Europa, México y Canadá también les advirtió con imponer aranceles a sus productos para corregir, según el nuevo mandatario, los desequilibrios comerciales negativos para Washington. Ya se sabe que la retórica comercial contra China es permanente.
Debido a esta situación, los gobiernos han tratado de no hacerse notar y su estrategia ha sido la de no aparecer en el radar de Trump, como mecanismo invisibilizador que le permita escaparse del discurso del nuevo inquilino de la Casa Blanca.
Todos los gobiernos pasaban bajo el radar, menos uno. Y ese precisamente es el hondureño, cuando en el mensaje de año nuevo del 1 de enero, la presidenta Xiomara Castro amenazó a Trump con cerrar la base militar estadounidense en Palmerola, sí Trump cumple la amenaza de deportar a decenas de miles de hondureños. Él lo ofreció en su campaña presidencial y lo ha reiterado en la transición que mantendrá una lucha frontal contra la inmigración indocumentada.
La declaración de Castro dejó atónitos a muchos observadores, ya que sin ser tomado en cuenta Honduras en la agenda del nuevo gobierno estadounidense, era la única gobernante que amenazaba con represalias si el nuevo líder de Washington se atrevía a cumplir con su oferta electoral.
Desde el lado del equipo de Trump que prepara la transferencia del poder no ha habido respuesta a la amenaza lanzada por Castro. Tal vez porque el peso hondureño en la política internacional es mínimo que no visualizaron el mensaje.

Congresistas responden
Pero desde la bancada republicana en la Cámara de Representantes si hubo respuesta a la amenaza de Castro.
El representante Andy Ogles, republicano, presentó un proyecto de ley que de aprobarse autorizaría a Trump a suspender toda la ayuda a Honduras que proporciona Washington.
Ogles, que habló con el medio conservador Breitbart News Network, dijo que redactó la Ley de Honduras Obstinadamente Descuida la Defensa y Corre el Riesgo de Alienar la Seguridad, con la cual la administración Trump tendría el poder de suspender toda asistencia a Honduras.
La ley es copatrocinada por la también legisladora republicana de Florida, María Elvira Salazar, que preside el subcomité del Hemisferio Occidental de la Cámara de Representantes.
El texto establece que “no obstante cualquier otra disposición de ley, a partir del redespliegue del personal militar y civil de los Estados Unidos de la Base Aérea Soto Cano en Honduras como resultado de la negativa o falta de voluntad del Gobierno de la República de Honduras de recibir a dicho personal, el presidente (Trump) está autorizado a suspender toda asistencia a la República de Honduras”.
Ogles añadió al Breitbart News Network que “la presidenta Castro está al tanto: ni ella ni nadie más en el gobierno hondureño le dictarán condiciones a los Estados Unidos de América”. “Mi legislación apoyará cualquier esfuerzo del presidente Trump por suspender la asistencia a Honduras si ese país decide comprometer la seguridad nacional de Estados Unidos”.
Mientras los senadores republicanos Mike Lee y Ted Cruz reaccionaron a la amenaza de Castro con advertencias de gravar remesas, deportaciones y con el retiro de la base estadounidense de Palmerola a Guatemala.
El senador Lee señaló que de concretarse la amenaza de Castro se buscaría una legislación que grave las remesas enviadas a Honduras, así como que los migrantes comprueben su estatus legal para hacer los envíos.
También indicó que la base militar podría ser trasladada a Guatemala que “es más amigable con Estados Unidos”.
De su lado, el senador Cruz señaló “quien se cree esta señora”, en referencia a la presidenta Castro.
Latinoamérica se prepara
Ante la inminente llegada al poder de Trump, cancilleres de 10 países latinoamericanos y del Caribe mantuvieron un encuentro en México para abordar el tema migratorio ante “el contexto actual”, en referencia a la asunción de Trump, según informó el canciller hondureño Enrique Reina en su cuenta de X.
La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum, una de las mayores amenazadas por Trump a la que exige detener a los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos, así como combatir a los cárteles de las drogas mexicanos, le ha hecho frente a Trump, pero busca el apoyo de los demás países de la región.
Pero no todos los países sienten temor por la llegada de Trump a la Casa Blanca, ya que hay ciertos gobernantes que están en sintonía con el nuevo presidente.
Los presidentes Javier Milei de Argentina, Nayib Bukele de El Salvador y Daniel Noboa de Ecuador fueron invitados por el equipo de Trump a la ceremonia de toma de posesión que se celebra este lunes en Washington. También fue invitado Edmundo González, a quien Washington reconoce como el ganador de las pasadas elecciones en Venezuela.
Estos tres gobernantes se encuentran en la misma frecuencia que la futura administración norteamericana.
Tal es la situación que el embajador de Estados Unidos en El Salvador, William Duncan, anunció que los ciudadanos salvadoreños tendrán acceso rápido a suelo norteamericano.
En la cuenta de la embajada estadounidense en El Salvador, el embajador Duncan posteo en X «A partir de este año, El Salvador se unirá a Global Entry, facilitando a los viajeros salvadoreños un acceso rápido a EE. UU. Con solo 14 países en este programa, este logro destaca la sólida relación entre Estados Unidos y el gobierno del Presidente Bukele, y su compromiso con promover los viajes y el comercio”.

Paz mediante la fuerza
La nueva política exterior de Trump, cuya conducción estará a cargo de Marco Rubio, el primero de origen hispano y de ascendencia cubana, está centrada en obtener beneficios comerciales y de seguridad.
Al bloque europeo, latinoamericano y a China les adelantó que el uso de aranceles estará en su variedad de medidas a utilizar, ya que considera que se aprovechan de Estados Unidos y mantienen un comercio injusto.
En el tema de seguridad, ha señalado que utilizará la fuerza para lograr la paz y los objetivos de la diplomacia de Washington alrededor del mundo.
Recientemente lo ratificó tras anunciar que el acuerdo alcanzado por Israel y el grupo islamisma Hamás para una tregua en Gaza se logró por la presión norteamericana, ya que Trump amenazó con un “infierno”, si el grupo palestino no liberará a los rehenes antes de asumir su mandato.
“Seguiremos promoviendo la PAZ MEDIANTE LA FUERZA en toda la región, aprovechando el impulso de este alto el fuego para seguir ampliando los históricos Acuerdos de Abraham. Esto es sólo el principio de grandes cosas por venir para América y, de hecho, ¡para el mundo!”, escribió Trump en su red social Truth Social.
Este es el nuevo Trump que asumirá la Casa Blanca, iniciando una nueva era económica, ideológica y hasta cultural en Estados Unidos y con la consiguiente expansión en el resto del mundo, donde solo China y Rusia podrán hacerle frente, pero defendiendo cada país sus propias reclamaciones como son Taiwán y la guerra en Ucrania respectivamente. (PD).