Guatemala – El gobierno del presidente Jimmy Morales analiza decretar el estado de calamidad para hacer frente a los desastres que han ocasionado las lluvias en Guatemala, donde ya se contabilizan 26 muertos y más de 320,000 afectados, además de 115 carreteras dañadas y 15 puentes destruidos.
Luego de mantener una reunión con ministros y autoridades de Protección Civil, el mandatario dijo en rueda de prensa que debido a las leyes que impiden el uso acelerado de recursos públicos se sopesa la posibilidad de decretar el estado de calamidad.
Morales agregó que inicialmente se decidió instalar un espacio interinstitucional para dar respuesta inmediata a los miles de afectados por las lluvias porque la prioridad es preservar la vida de los guatemaltecos.
«Se buscarán las alternativas basadas en ley para recuperar la infraestructura dañada y por eso hemos invitado a instituciones como la Contraloría General de Cuentas y la Procuraduría de Derechos Humanos para que todo se haga con transparencia», sostuvo.
El estado de calamidad permitirá a las autoridades hacer compras por excepción, pero «no se recibirá un cheque en blanco», aclaró.
Morales explicó que desde el pasado sábado se está analizando esa posibilidad y que se podría presentar en las próximas horas al Congreso debido a la emergencia que vive Guatemala.
El mandatario llamó a todos los sectores a unir esfuerzos y buscar por consenso las alternativas para atender la situación porque «una de las grandes prioridades de la población es que se recuperen las carreteras».
Recordó que en julio pasado se solicitó al Organismo Legislativo el estado de calamidad pública para prevenir lo que hoy está sufriendo el país, pero el Congreso lo rechazó.
«Ahora es el momento que consensuemos la alternativa que permita recuperar la red vial sin violentar la ley y garantizando la transparencia», enfatizó el mandatario al sugerir también la posibilidad de hacer reformas a la Ley de Compras y Contrataciones del Estado.
Por su parte, el secretario de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Sergio García Cabañas, detalló que debido a las lluvias existe una alerta amarilla institucional (prevención) y que son diez de los 22 departamentos los más afectados por la época de invierno.
Detalló que este año se han registrado 26 muertos, 20 heridos, 4 desaparecidos, 320.507 afectados, 4.119 damnificados (que perdieron sus viviendas), 6.851 evacuados, 1.579 albergados y 1.719 personas en riesgo.
Las lluvias también han dejado 1.973 viviendas con daño leve, 2.034 con moderado, 145 destruidas y 310 en riesgo.
También 115 carreteras han sido afectadas y otras 3 destruidas, 24 puentes afectados y 15 destruidos así como 609 escuelas con daños.
Por su parte, el director del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivymeh), Edy Sánchez, manifestó que Guatemala sufre el impacto de lluvias similar a la tormenta Agatha que causó destrozos en 2010.
«La situación puede agravarse porque lo más preocupante es el grado de saturación del terreno en el noroccidente, Franja Transversal del Norte, Chiquimula y Zacapa», alertó.
De acuerdo con el experto, la saturación de la humedad llega en algunos casos arriba del 250 %.
Además, anunció que las lluvias van a continuar por lo menos tres semanas y que un día «crítico» podría ser el próximo jueves, lo que podría causar más derrumbes. ACAN-EFE
