“Con el fideicomiso lo productores tendrángarantizado el financiamiento para cultivar maíz, frijoles,arroz, vegetales, palma aceitera, y en esta cosecha de postrera se verán los frutos de esta inversión, que como Estado nos garantizará la reactivación del agro hondureño”, argumentó el mandatario en cadena de radio y televisión.
En ese sentido, el gobierno logró este lunes que el sector bancario nacional, agrupado en la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias (AHIBA), aceptara una propuesta económica para la reactivación del agro, estableciendo una tasa preferencial de 7.25 por ciento para todo el sector agrícola, sin excepciones.
“Esta es una gran noticia que nos llena de esperanza, agradezco al sector financiero nacional su apoyo y compromiso con esta causa y los felicito por la responsabilidad social con que han actuado. Por primera vez en nuestra historia los productores del agro hondureño tendrán acceso a una tasa preferencial como esta”, manifestó el gobernante.
En las últimas semanas en la región centroamericana ha vivido los resultados del fenómeno climatológico conocido como “El Niño” producido por el cambio climático que los humanos han provocado a lo largo de la historia.
Como consecuencia de este factor climático Honduras se ha visto perjudicado por una sequía que se ha prolongado más de lo acostumbrado.
En el sector agrícola, la sequía ha provocado la pérdida de los cultivos de frijoles y maíz, especialmente el de los productores de subsistencia, las familias más pobres y vulnerables del “corredor seco” y otras regiones han sido las más afectadas.
Sin embargo desde el inicio de la sequía, el gobierno ha atendido los 64 municipios más afectados y en Consejo de Ministros se aprobó un fondo de emergencia de 100 millones de lempiras.
Los recursos se destinarán para la adquisición de alimentos y vitaminas que serán entregadas a las familias, pero a cambio las mismas deberán hacer trabajo voluntario que les beneficiará a ellos mismos.
Los trabajos voluntarios consistirán en la construcción de pisos, techos y otras mejoras de viviendas, así como en la recolección y contención del agua.