Tegucigalpa – El Foro Intereclesiástico de Honduras (FIH) consideró “inconstitucional, discriminatoria y anti democrática” la moción aprobada en el Congreso Nacional en cuanto a que se permita la lectura de la Biblia en las escuelas y colegios del sector público del país.
Tal iniciativa fue propuesta por el diputado Tomás Zambrano el pasado 10 de mayo, pero la FIH sostiene que la misma es contraria a la Constitución Política del país, ya que la carta magna expresamente señala que la educación es laica en Honduras, de manera que la educación que imparte el Estado es pública y no “debe establecerse ninguna religión o doctrina en particular”.
La posición del Foro Intereclesiástico fue expuesta en un comunicado emitido por la institución la noche del martes.
Asimismo, recordó que la moción propuesta por Zambrano y aprobada por la Cámara Legislativa es “contraria de los tratados internacionales de Derechos Humanos” suscritos por el Estado, ya que “discrimina aquellos niños y adolescentes que no comparten la Biblia que se usa en las escuelas y colegios que no pertenecen a otra religión”.
También reclamaron el respeto de parte de todos los servidores públicos el respeto al Estado laico, estableciendo que el Estado de Honduras “no es confesional, ni se identifica con ninguna religión”, por lo que ni el gobierno, ni el Congreso Nacional tienen como obligación promover determinada religión, la lectura de la Biblia o creencia religiosa”.
En ese sentido recordaron que el responsabilidad estatal y de sus agentes promover la libertad de expresión, la libertad de culto y religión.
Por ello piden a los legisladores a que realicen sus actividades en el mandato constitucional y que conduzcan sus actuaciones en el marco de respeto a la laicidad del Estado y el respeto a la diversidad religiosa, así como la no discriminación de menores, especialmente aquellos que asumen libre sus creencias.
El documento del FIH se interroga en cuanto a ¿qué Biblia y que tipo de análisis e interpretación se impondrá en las instituciones educativas?”, recordando que a las escuelas y colegios asisten infantes de diferentes religiones y que cada una de ellas tiene su Biblia.
