“El presidente, Juan Orlando Hernández, nos ha orientado en primer lugar para que busquemos alguna forma de flexibilizar las medidas que se imponen al sistema bancario a fin de canalizar mayores recursos para el sector agropecuario”, apuntó el miembro de la CNBS, Adonis Lavaire.
Recordó que ya en diciembre la CNBS, flexibilizó algunos créditos para los sectores de vivienda y las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), con lo que este año se espera que tengan un impacto en las reservas equivalente a unos 300 millones de lempiras.
Señaló que ahora le toca a los bancos buscar la manera de flexibilizar sus préstamos en cuento a plazos y tasas a fin de ir trabajando para canalizar más crédito a las Mipymes.
“Vamos a seguir trabajando para darle acceso también a la agroindustria y a la agricultura, en el sentido de tener mayores plazos y mejores tasas; estamos platicando que en este momento el sector bancario solamente financia solamente un cinco por ciento del total de la cartera a ese sector que es uno de los que más dinamiza la economía y que más empleo genera y de donde salen las exportaciones de Honduras”, arguyó el funcionario.
Explicó que las tasas de interés son un componente del mercado financiero y en ese sentido, la nueva CNBS va a atacar las medidas regulatorias que encarecen el crédito, aunque se procurará que las mismas no vayan a afectar la estabilidad del sistema financiero, es decir, es un balance que se tiene que buscar.
Indicó que el presidente Hernández viajará a Guatemala para conversar con los inversionistas del Banco de Desarrollo Rural (Banrural) a fin de crear una institución similar en Honduras que permita que esas unidades productivas tengan acceso a créditos a buenos plazos y tasas.
Añadió que la creación de ese banco generará una mayor competencia y lograr que los demás bancos puedan bajar las tasas y ampliar los plazos para los sectores agropecuarios y de Mipymes.
“En este momento lo que hay son estrategias sobre la mesa y no se ha decidido qué camino vamos a llevar; sabemos que hay un problema en Banadesa, sin embargo, tenemos que actuar responsablemente y se están buscando diferentes opciones y escenarios y en su momento el presidente Hernández va a decidir cuál es el más conveniente y el que menos daño puede provocar a la economía hondureña”, resaltó.
Por otro lado, Lavaire apuntó que la idea de crear una superintendencia mercantil para combatir el lavado de activos, es para poner orden en el país, mediante la confección de un registro de las empresas mercantiles, sociedades anónimas y todo ese tipo de sociedades que establece el Código de Comercio.
Reveló que en este momento no se sabe ni la cantidad de sociedades mercantiles que hay, porque aunque se inscriben en el registro mercantil, pero no hay una certeza que indique cuáles están activas o inactivas.
En ese sentido, se está valorando una ley que permita tener un control y una supervisión sobre esas sociedades mercantiles.
