«Ya no son pollos de granja, son vuvuzelas de Sudáfrica», espetó el mandatario antes de subir al coche presidencial para dirigirse a un acto, con lo que comparó el ruido de los periodistas reclamando su atención con el de las cornetas de plástico que se hicieron famosas en el pasado Mundial de Sudáfrica.
Las vuvuzelas adquirieron un gran protagonismo en este evento deportivo por su irritable ruido parecido al zumbido de una abeja.
Así, estas cornetas sustituyen como calificativo al de «pollos de granja», que ha usado Morales para comparar el sonido de estas aves con los requerimientos de los periodistas a la hora de preguntarle.
La relación de Morales y los medios de comunicación de Bolivia ha tenido varios incidentes en los últimos años y el mandatario ha llegado a considerar a la prensa como uno de sus enemigos.