El miembro de la comisión legislativa de seguridad, el democristiano, Augusto Cruz Asensio, confirmó que para la elaboración de este proyecto, ya hubo conversaciones con distintos grupos sociales, entre los que mencionó la autoridades de la secretaría de Seguridad y con las Fuerzas Armadas, con sectores de sociedad civil y el sector académico representado por las universidades, entre otros.
En ese sentido, aseguró que “este dictamen ha sido enriquecido, definitivamente por todos los sectores de la sociedad hondureña”.
Reiteró que ese grupo elite, dependerá de la Policía Nacional y no de las Fuerzas Armadas.
Sin embargo, cuando el presidente del Legislativo, Juan Hernández, presentó ese proyecto, manifestó que sería una fuerza paralela a la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas.
Hace unos días, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Ramón Custodio, hizo fuertes cuestionamientos al proyecto de la “Tigres”, entre ellos que su infraestructura debe ser de la Policía Nacional.
Hasta el momento, la estructura de la “Tigres”, continúa siendo propuesta con un funcionamiento de 200 hombres, quienes estarán concentrados en los batallones militares y harán uso de tecnología de punta para combatir el crimen.
Igualmente, ese grupo será adiestrado en materia de derechos humanos.
