Tegucigalpa – La falta de lluvias tiene en vilo a los pobladores de los municipios del corredor seco donde el riesgo de que la cosecha de postrera arrebate el total de los cultivos es una amenaza latente.
El alcalde de Texiguat, El Paraíso, Erick Mejía, reportó escasez de lluvias desde hace casi 20 días en ese municipio del suroriente del país, elevando la preocupación entre la población de la zona, especialmente entre los campesinos.
Allí, unos 2,000 pequeños productores sembraron en seco en la última semana de agosto para la cosecha de postrera de maíz, mientras que el frijol lo sembraron en la primera semana de septiembre.
“Necesitamos agua, aquí no es responsabilidad del gobierno, son las consecuencia del cambio climático, pero le pedimos al gobierno la reactivación de la Red Solidaria”, dijo Mejía que también señaló que están a la espera de la transferencia condicionada, que no ha llegado a esa zona de El Paraíso.
La Cruz Roja y el Programa Mundial de Alimentos intervinieron a 500 familias, mientras la agencia ADRA prometió ayuda a otras 525 familias por un apoyo superior a los 2,300 lempiras.
“Con este panorama no habrá cosecha de postrera, tendremos cero cosechas en esta”, advirtió el edil de Texiguat.
Para el alcalde, el impacto se sentiría mayormente en el primer semestre del próximo año, pues cuentan con la producción que permitió la buena cosecha de primera.
Impacto en agro y ganadería
La preocupación también es palpable en Nueva Armenia, donde su alcalde Edward Andino dijo que ante esta sequía están a la espera de la intervención del gobierno para prevenir una hambruna.
“Esto es un llamado al Gobierno, estamos en espera de esa asistencia técnica en materia de prevención, porque lo que se viene no solo afecta a nuestros agricultores, también al sector ganadero, el pasto ya no da”, dijo al prever el impacto en la baja producción de lácteos.
Andino señaló que el presupuesto que invierten a nivel local no da abasto ante la magnitud del problema de sequía y sus efectos, pues en la actualidad, un 80 % de las personas que habían sembrado granos básicos han perdido sus cosechas. “Es alarmante, esto viene con escasez de granos, más que nosotros somos un municipios que vivimos del maíz y el frijol”.
La sequía y la amenaza de la hambruna es una realidad que también se vive en Soledad, Yauyupe, Liure, Vado Ancho, detalló Andino.
Acciones gubernamentales lentas
Aunque ambos alcaldes indicaron que han tenido comunicación con la ministra de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), Laura Suazo, las acciones concretas no llegan.
La declaratoria de emergencia fue hace 4 meses y este es un tema que no espera, refirió el alcalde de Texiguat, quien pidió despolitizar el agro.
Ante la nueva llamada de los ediles, Suazo dijo que realizará una visita de inmediato a esas zonas y expresó que “ojalá que la lluvia que vaya a caer en postrera sea suficiente” para que la semilla sembrada en las últimas semanas pueda dar.
La funcionaria dijo que quizá las alternativas de esas regiones no sea maíz y frijoles, sino de cultivos adaptados a la zona.
Anunciada sequía
El director de Cenaos, Francisco Argeñal, recordó que las proyecciones ya indicaban que estas zonas estaban entre las más afectadas por la sequía prolongada.
“Ese problema que estamos viendo en el corredor seco ya lo esperábamos porque está identificado como una zona vulnerable a la sequía donde una sequía meteorológica se convierte en una sequía hidrológica y agrícola, casi de manera inmediata”, indicó.
Los pronósticos de ondas tropicales próximas, como la prevista para este domingo, no llegará a los municipios del corredor seco, aunque para el próximo miércoles otra onda tropical de mayor amplitud da esperanza de cortar con al menos 20 días de sequía en ambos municipios.
“Esa onda de amplitud media va permitir que la cantidad de precipitaciones que se pronostican serán en cantidades que podrían mojar el suelo”, afirmó Argeñal. VC