Por: Otto Martín Wolf
Fantasías delirantes de poder, omnipotencia, intolerancia y un ego infinito son algunos de los requisitos indispensables para pertenecer.
En la Antigua Roma, Nerón, miembro notable del club, fue un sicópata que mató a todo al que su retorcida mente le ordenó, inclusive a su propia madre, dice la leyenda que “para ver el vientre en donde él había estado”.
Finalmente ordenó quemar Roma para disfrutar del espectáculo mientras tocaba la lira.
He leído un par de biografías de Bonaparte y todavía no he encontrado algo que explique por qué sumió a Europa en las “Guerras Napoleónicas”, excepto que también era miembro de ese club. Resultado en muertos? Más de 12 millones de personas… la “gloria” del Emperador era más importante que la vida de los seres humanos.
Adolfo Hitler creía en la superioridad de los alemanes como raza (arios) y sin ninguna razón válida odiaba a los judíos. En su locura desató la Segunda Guerra Mundial, causando la muerte -directa e indirectamente- de cincuenta millones de personas.
Sabe cuál era su lema político antes de llegar al poder? “Hagamos grande a Alemania de nuevo!”
Los periódicos más serios y responsables de los Estados Unidos y del mundo, así como los más importantes noticieros de televisión sonaron la campana de alarma cuando se vio que Trump podía ganar.
El temor de muchos de ellos se hizo realidad, ahora es presidente de los Estados Unidos, es el hombre más poderoso del planeta.
Los mandatarios de otras naciones saben lo que el temperamental carácter del nuevo presidente puede significar para la paz mundial y talvez hasta la existencia misma de la especia humana.
Es seguro que tienen miedo, pero la verdad es que muy poco o nada pueden hacer ante la terrible realidad que enfrenta la humanidad.
Un muro para separarse de México es sólo otra idea loca que quizá no pueda realizar, como tampoco habrá una forma civilizada de lograr que México pague su costo.
Pelearse con reporteros e insultar a todo el que se le pone enfrente es nada, como tampoco que denigre a sus propias agencias de inteligencia.
Ni siquiera su violento y racista discurso está ente las verdaderas razones para preocuparse.
El peor de los sueños, mejor dicho, la peor de las pesadillas de los escritores de ciencia ficción y terror está a punto de cumplirse.
Desde este miércoles tendrá acceso al botón que controla más de 1500 ojivas termonucleares, suficientes para matarnos a todos y dejar una nube radioactiva que tardará más de diez mil años en disiparse.
A qué nos enfrentaremos como raza humana a partir de este 20 de Enero?
Estamos hablando de un hombre que dijo públicamente que podía disparar a cualquier persona en la Quinta Avenida de New York y no perdería ningún simpatizante.
Es el mismo que dijo que él sabía más acerca del grupo radical Isis que cualquiera de los generales de su mismo ejército.
Después de que se hiciera pública una grabación en la que, con su propia voz, relataba divertido y con todo detalle cómo abusaba de su poder financiero e imagen para manosear a las mujeres declaró que “nadie tenía más respeto por las mujeres que él”.
Un hombre capaz de mentir, mentir y volver a mentir y luego, ante la evidencia, negar todo para… volver a mentir.
En esa mente estará el botón termonuclear y el destino de la humanidad a partir del próximo miércoles.
Recomiendo a todos ver una vieja película llamada “Dr. Strangelove o cómo aprendí a no preocuparme y a amar la bomba”, verán de lo que es capaz un megalómano. Más de Otto Martín Wolf. Aquí…
