spot_img

EEUU necesita nueva estrategia para contener a Corea del Norte, dicen expertos

Por:

Compartir esta noticia:

Washington – El Gobierno del presidente de EE.UU., Barack Obama, y sus aliados, deben estudiar una nueva estrategia para contener las ambiciones nucleares de Corea del Norte tras su exitoso lanzamiento de un misil de largo alcance, según afirmaron hoy expertos.
 

El lanzamiento del proyectil, en claro desafío a Washington, silenció a los escépticos y demuestra el avance de los norcoreanos hacia el desarrollo de su capacidad nuclear y la urgencia de que la comunidad internacional evalúe nuevas opciones frente a Pyongyang.

«Durante mucho tiempo Corea del Norte fue objeto de burlas y esta prueba ha sido su manera de recuperar prestigio internacional, aparte de demostrar que sí son capaces y no pueden ser ignorados. Es una táctica de mercadeo y publicidad», dijo a Efe en una entrevista telefónica Philip Yun, director ejecutivo de Ploughshares Fund y exasesor de EE.UU. para asuntos en la península norcoreana.

«Hay un riesgo de exagerar y, desde luego, esto es algo serio, pero no afecta nuestra seguridad significativamente. Pero, a largo plazo, será algo muy significativo que sí debe preocupar y EE.UU. tiene que responder adecuadamente», agregó Yun, quien viajó en misiones diplomáticas de alto nivel a Corea del Norte en 1999 y 2000.

Para Yun, el lanzamiento del cohete responde a las presiones económicas, políticas y militares que afronta el Gobierno de Pyongyang, y consideró que la comunidad internacional no debe «exagerar o subestimar» a Corea del Norte sino «mantener la perspectiva».

Marcus Noland, subdirector del Instituto Peterson para Economía Internacional, advirtió en su página web de que, ante el avance de los norcoreanos en las esferas nuclear y de misiles, «el resto del mundo parece tener poca capacidad de reducir su marcha».

«Corea del Norte parece ser un país que es indiferente a los premios o castigos…lo que estamos haciendo ahora simplemente no es suficiente para disuadirlos», señaló Noland.

Dos resoluciones de Naciones Unidas, una de 2006 y otra de 2009, que prohíben a Corea del Norte las pruebas de proyectiles balísticos e impone sanciones para castigar tanto a la élite del país asiático como a su industria nuclear.

Sin embargo, ni las presiones económicas ni el aislamiento político de Pyongyang parecen surtir efecto.

El lanzamiento del misil de largo alcance, un Unha-3, coincide con el primer aniversario de la muerte de Kim Jong-il y se produjo en vísperas de los comicios en Corea del Sur el próximo 19 de diciembre.

Pyongyang insiste en que el lanzamiento tuvo el objetivo de poner en órbita un satélite científico, pero la comunidad internacional cree que en realidad el Gobierno norcoreano persigue una prueba clandestina de misiles de largo alcance.

En abril pasado, los norcoreanos ya habían intentado el lanzamiento de otro proyectil, que cayó en el Mar Amarillo hecho pedazos poco después de su despegue.

Para los expertos, esta nueva provocación ofrece una oportunidad para que EE.UU. y la comunidad internacional fortalezcan aún más su cooperación y su estrategia común en la zona del Pacífico asiático.

China ha aconsejado a todas las partes implicadas en la región mantener «la cabeza fría» para evitar una escalada de tensión en la península coreana y que el Consejo de Seguridad reaccione de forma «prudente y moderada».

El exgobernador de Nuevo México y exembajador de EE.UU. ante Naciones Unidas Bill Richardson consideró hoy que el lanzamiento del cohete es un mensaje para consumo doméstico en Corea del Norte.

«Es su manera de decir que está de regreso y nadie lo alejará de los titulares», dijo Richardson a la cadena CNN, al referirse al líder norcoreano Kim Jong-un.

«Necesitamos una nueva estrategia para bregar con Corea del Norte», subrayó Richardson, también exenviado especial de EE.UU. en ese país.

Kim Jong-un lleva apenas un año en el poder y «quiere demostrarle a su pueblo que está firmemente en control, y que el país tiene poderío militar y tecnológico, pese a los graves problemas económicos», dijo Richardson a Fox News.

Richardson se mostró «decepcionado» de que Jong-un, educado en Suiza y con buen dominio del inglés, haya optado «por seguir los pasos de su padre» en vez de «ir por un nuevo derrotero».

La acción de Corea del Norte provocó hoy una enérgica condena tanto en los pasillos del Congreso como en la Casa Blanca y el Departamento de Estado, que advirtieron de que el incumplimiento de sus obligaciones internacionales tendrá «consecuencias», pero no precisaron cuáles ni cuándo.


spot_img
spot_img

Lo + Nuevo

spot_img
spot_img
spot_img
spot_imgspot_img