Fuensaldaña (Valladolid) – El novelista y ganador del Premio Cervantes en 2016, Eduardo Mendonza, ha reconocido este domingo que casi es “un histórico” de la literatura española y ha asegurado que empieza a tener valor más “como reliquia que como persona”.
“Puedo contar cosas que ya queda muy poca gente que pueda contar”, ha remarcado Mendoza en declaraciones previas a la conversación junto a los escritores César Pérez Gellida y Dolores Redondo, en la charla de clausura del festival literario Blacklladolid desde el castillo de Fuensaldaña (Valladolid), que en su cuarta edición ha abordado la relación entre literatura y sexo y que ha homenajeado con su premio al escritor barcelonés.
Un encuentro por el que han pasado cineastas (Mabel Lozano), cantantes (Santi Balmes), cómicos (J.J. Vaquero o Henar Álvarez) y sobre todo escritores (Máximo Huerta o Alice Kellen), que se ha celebrado en el hemiciclo del castillo de Fuensaldaña, una fortaleza del siglo XV que en los primeros años de la etapa autonómica acogió las Cortes de Castilla y León.
Respecto al tema del festival, Mendoza ha señalado que del sexo se viene hablando “desde Adán y Eva”, pero ha querido diferenciar entre “el sexo biológico” que no tiene “mucho interés desde el punto de vista literario”, pero tiene implicaciones en relación al poder o que se utilice como una forma de coacción y, en definitiva, que “tiene tantas connotaciones que es un mundo en sí mismo”.
El autor de ‘Tres enigmas para la Organización’ (2024), que anunció que abandonaba la novela para poco después publicar esta obra, ha reconocido que su escritura siempre deriva hacia este género y ha destacado la importancia del nombre de sus personajes “porque si le pones un nombre llamativo pertenece al lenguaje y si se llama Serafina Esparraguera sólo tiene una pinta”.
Respecto al tema del festival, el padrino y escritor César Pérrez Gellida, ha afirmado en un diálogo previo que si tuviera que elegir entre sexo y literatura elegiría el primero “por su cotidianidad”, mientras que la madrina del certamen, la novelista Dolores Redondo, ha reconocido que es como elegir entre “el amor y la pasión”.
“Uno es el amor, la literatura, y la pasión, es ese señor”, ha afirmado mientras señalaba al Eduardo Mendoza, que acumula galardones como el Liber, el Nacional de Cultura de la Generalitat de Cataluña, Franz Kafka o el Premio de la Crítica por la novela ‘Los soldados de Cataluña’.
“Me cuesta escribir las escenas de sexo, porque hay una delgada línea entre ser un mojigato y ser un grosero, y es difícil mantenerse en esa línea en la que puedes ser explícito o sugerir”, ha ahondado Pérez Gellida, que ha reconocido que pese a su dificultad se lo pasa “muy bien” durante su redacción.
Para Redondo, en sus novelas “no hay demasiadas escenas de sexo” porque no lo pedía la acción de las novelas, en concreto algunas escenas de su Trilogía del Baztán, y ha reflexionado con que existe una “contaminación” en el lenguaje del sexo y del amor que hizo que le costara escribirlas aunque fuera “muy entretenido” a nivel literario.
En su charla, Redondo también ha dado algunos detalles de su próxima novela ‘Las que no duermen. NASH’ que va a ser el principio de cuatro historias que “no tienen que estar relacionadas entre ellas” y cuya presentación tendrá lugar el próximo 18 de noviembre en San Sebastián.
La autora donostiarra ha explicado que el título de la novela proviene de su propia actividad nocturna y que le recuerda a cuando su abuela le decía que “hacer cosas de noche es de brujas”, así como ha señalado que la protagonista de este novela, además, será un nuevo personaje femenino – una psicóloga forense que reconstruye la vida personal de las víctimas – llamada NASH, siglas de los tipos de muerte que encuentra en sus casos: Natural, Accidental, Suicidio y Homicidio.
Pérez Gellida ha reconocido un cambio en la atención en los medios y ha señalado que su próxima novela se publicará “en el último trimestre del año que viene”, aunque no ha querido adelantar el título porque tendría que “enterrar a las 114 personas de la sala y las 4.000 personas del streaming”.
También ha reconocido que está “muy contento” con las adaptaciones a otros formatos de sus libros, en particular, con la serie ‘Memento Mori’ cuya grabación de la segunda temporada se prolonga durante esta semana en Valladolid y que tras ello, se podrá dedicar a lo que más le gusta: “escribir, escribir y escribir”. EFE
