El mexicano Rubén Martínez Trujillo, supuesto líder de la banda narcotraficante, fue sentenciado a 16 años de cárcel, su compatriota Elvis Mendoza Rivera a 11 años y el piloto de la aeronave, el guatemalteco Otto Monzón, a 10 años de prisión.
Un tribunal penal de San José, encabezado por el juez Álvaro Abarca, leyó hoy la parte resolutiva de la sentencia, en la que declaró culpables de tráfico internacional de drogas a los tres sujetos.
Este caso se originó el 10 de octubre de 2010, cuando una avioneta de una compañía de taxis aéreos se estrelló en un río de San José y las autoridades descubrieron que transportaba 177 kilos de cocaína.
La avioneta era pilotada por los guatemaltecos Aníbal Ramírez, quien falleció horas después del accidente, y Otto Monzón, sentenciado hoy a prisión y quien permaneció meses hospitalizado debido a las heridas que sufrió en el accidente.
Un día después de estrellarse la aeronave, los dos mexicanos, dueños de la compañía de taxis aéreos, fueron capturados con 125,000 dólares cuando intentaban salir del país por un punto no controlado de la frontera con Nicaragua, después de haber intentado sobornar al agente que los detuvo.
En mayo de 2011 se generó una gran polémica cuando una jueza concedió el arresto domiciliario a los mexicanos, que estaban en prisión preventiva, algo que la fiscalía y medios de comunicación criticaron por considerar que existía peligro de fuga.
Vecinos de una comunidad de San José bloquearon carreteras y hasta se encadenaron a portones para impedir que los sujetos fueran trasladados a una vivienda que su abogado había alquilado para que cumplieran con el arresto domiciliario.
Tras varias semanas de polémica, un juez prorrogó la prisión preventiva a los mexicanos hasta que se celebró el juicio que concluyó hoy con la lectura de la condena.
