Tegucigalpa – El exdiputado del partido Liberal y Refundación (Libre), Rasel Tomé, calificó como un acto político la solicitud de la Confraternidad Evangélica de Honduras de reelegir al actual Fiscal General, Óscar Fernando Chinchilla.
“Estos actos que están proponiendo la iglesia evangélica es un acto más de la política del gobernante que está llevando al país por un abismo”, aseveró.
Tomé acusó que el presidente de la Confraternidad Evangélica, pastor Alberto Solórzano “está contento” porque el Fiscal Chinchilla no ha presentado ningún requerimiento fiscal a los responsables de las muertes ocurridas en el período postelectoral y los que permitieron la reelección presidencial.
“La mayoría del pueblo señala que el Fiscal no actuó como correspondía de presentar una acusación contra los que violentaron la Constitución al impulsar una reelección que está prohibida por los constituyentes y que es un delito en Honduras”, reiteró.
El exdiputado señaló que el próximo Fiscal General debe presentar requerimientos fiscales “contra los que violentaron la Constitución, los diputados que permitieron la reelección y David Matamoros por el fraude electoral”.
