Guatemala – El socialdemócrata Álvaro Colom, quien hoy entrega la Presidencia de Guatemala al general retirado Otto Pérez Molina, pidió a las nuevas autoridades están vigilante de la crisis económica en Europa y Estados Unidos, al rendir su último informe de Gobierno ante el Congreso.
Aunque hay una macroeconomía estable «se tendrá que estar vigilante de la crisis económica de Europa y Estados Unidos, y del cambio climático que va a afectar a la región», expresó el mandatario saliente.
Colóm aseguró que a pesar de tanta crisis, dejó un 29 % más de reservas monetarias y aumentó en más de 12.787 millones de dólares el producto interno bruto (PIB) durante sus cuatro años de gobierno.
«Estamos ante una situación de privilegio para afrontar la amenaza de una crisis económica el próximo año. Guatemala puede soportar cualquier problema que pueda venir por la crisis en Europa y Estados Unidos», reiteró.
Sostuvo que el sistema bancario guatemalteco está sólido y cuenta con más de 1.918 millones de dólares para financiar al sector productivo.
Destacó que durante su gestión se concluyó con los Tratados de Libre Comercio (TLC) con Panamá, Colombia y Chile, y la unificación del acuerdo entre Centroamérica y México.
Colom dijo que su país logró abrir espacios importantes, sobre todo en América Latina y el Caribe, que le dio su apoyo para ser elegido como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Valoró el apoyo que le dio a su Gobierno la Organización de Estados Americanos (OEA), sobre todo para avanzar en la solución del diferendo territorial entre Guatemala y Belice, que deberán celebrar una consulta popular para que sus pueblos decidan si llevan el caso a una corte internacional.
También resaltó la consolidación de la presencia de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) que contribuye a combatir el crimen organizado y destacó que durante su Gobierno 14 de los 19 narcotraficantes más buscados fueron detenidos.
En seguridad, Colom mencionó que logró reducir en sus cuatro años de gestión de 47 a 38 por cada 100 mil habitantes la tasa de homicidios y que decomisó a los cárteles del narcotráfico más de 11.892 millones de dólares en drogas, autos, armas y aeronaves.
Manifestó que para hacer frente al flagelo de las drogas, Guatemala tiene que estar en la estrategia regional porque «si la región se une habrán mejores resultados».
Además, hizo un llamamiento a los mercados de consumo, entre ellos Estados Unidos, para que asuman su responsabilidad en el control de los químicos precursores y el tráfico de armas.
Entre otros logros, destacó la gratuidad de la salud y la educación, y entre los retos que dejó pendientes señaló la reforma fiscal y de la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
El informe de Colom fue el último punto de la primera parte de la sesión solemne en el Congreso, cuyos diputados se trasladaron de inmediato hacia el Domo Polideportivo, para continuar con este acto de la transmisión de mando presidencial.
En ese centro deportivo, Colom entregará en los próximos minutos la Presidencia de Guatemala al general retirado Otto Pérez Molina, del derechista Partido Patriota (PP), para un periodo de cuatro años.
Los presidentes de México, Colombia, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Haití, Surinam y Georgia, así como el príncipe Felipe de Borbón, heredero de la Corona española, figuran entre los asistentes a la investidura de Pérez Molina como el séptimo presidente de la nueva era democrática que se inició en 1986 en Guatemala.
Colóm aseguró que a pesar de tanta crisis, dejó un 29 % más de reservas monetarias y aumentó en más de 12.787 millones de dólares el producto interno bruto (PIB) durante sus cuatro años de gobierno.
«Estamos ante una situación de privilegio para afrontar la amenaza de una crisis económica el próximo año. Guatemala puede soportar cualquier problema que pueda venir por la crisis en Europa y Estados Unidos», reiteró.
Sostuvo que el sistema bancario guatemalteco está sólido y cuenta con más de 1.918 millones de dólares para financiar al sector productivo.
Destacó que durante su gestión se concluyó con los Tratados de Libre Comercio (TLC) con Panamá, Colombia y Chile, y la unificación del acuerdo entre Centroamérica y México.
Colom dijo que su país logró abrir espacios importantes, sobre todo en América Latina y el Caribe, que le dio su apoyo para ser elegido como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Valoró el apoyo que le dio a su Gobierno la Organización de Estados Americanos (OEA), sobre todo para avanzar en la solución del diferendo territorial entre Guatemala y Belice, que deberán celebrar una consulta popular para que sus pueblos decidan si llevan el caso a una corte internacional.
También resaltó la consolidación de la presencia de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) que contribuye a combatir el crimen organizado y destacó que durante su Gobierno 14 de los 19 narcotraficantes más buscados fueron detenidos.
En seguridad, Colom mencionó que logró reducir en sus cuatro años de gestión de 47 a 38 por cada 100 mil habitantes la tasa de homicidios y que decomisó a los cárteles del narcotráfico más de 11.892 millones de dólares en drogas, autos, armas y aeronaves.
Manifestó que para hacer frente al flagelo de las drogas, Guatemala tiene que estar en la estrategia regional porque «si la región se une habrán mejores resultados».
Además, hizo un llamamiento a los mercados de consumo, entre ellos Estados Unidos, para que asuman su responsabilidad en el control de los químicos precursores y el tráfico de armas.
Entre otros logros, destacó la gratuidad de la salud y la educación, y entre los retos que dejó pendientes señaló la reforma fiscal y de la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
El informe de Colom fue el último punto de la primera parte de la sesión solemne en el Congreso, cuyos diputados se trasladaron de inmediato hacia el Domo Polideportivo, para continuar con este acto de la transmisión de mando presidencial.
En ese centro deportivo, Colom entregará en los próximos minutos la Presidencia de Guatemala al general retirado Otto Pérez Molina, del derechista Partido Patriota (PP), para un periodo de cuatro años.
Los presidentes de México, Colombia, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Haití, Surinam y Georgia, así como el príncipe Felipe de Borbón, heredero de la Corona española, figuran entre los asistentes a la investidura de Pérez Molina como el séptimo presidente de la nueva era democrática que se inició en 1986 en Guatemala.
