Tegucigalpa – El sector cafetalero nacional le apuesta a la diversificación productiva ya que con los precios actuales del aromático en el mercado internacional, ni para cubrir los costes de producción les alcanza.
-Uno de los proyectos es el cultivo y comercialización del aguacate hass, de los cuales Honduras importa 11 millones de dólares al año.
El directivo de la Unión de Cooperativas de Servicios Agropecuarios Limitada (Uniocoop), Marlon Rodríguez, indicó que todo lo que han hecho las organizaciones cafetaleras en 2017 y lo que va de 2018, apuntan a trabajar en la diversificación en las zonas agrícolas cafetaleras con el objetivo de buscar mayores ingresos para los productores de café.
Eso debido a que en la Bolsa de Valores de Nueva York, el precio internacional del aromático no favorece a los productores nacionales y en ese sentido, hay fincas cafetaleras que ya producen frutas, vegetales y hasta madera de color.
Los cafetaleros buscan otras opciones debido a que el precio del café está deprimido los caficultores buscan otras opciones para compensar las pérdidas por lo que tomando en cuenta que Honduras importa alrededor de 11 millones de dólares en la importación de aguacates has, los productores tienen el proyecto de producirlo y comercializarlo localmente ya que es una fruta de gran demanda en el país, apuntó Rodríguez.
Por su parte, el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé), asegura que busca apoya a los productores en su aspiración de diversificar la producción mediante financiamiento accesible.
El gerente del Ihcafé, Adilson Ávila, refirió que el año pasado, se cerró con cerca de dos mil millones de lempiras, lo que representa una importante de dinero, pero todos esos recursos son administrados primero para pagar las deudas de los productores que han adquirido préstamos con el sistema financiero, segundo para pagar deudas de productores que tienen compromisos con programas del Instituto Hondureño de Café porque sacaron créditos para fertilizantes, secadoras solares e insumos.
En Honduras más de 250 mil familias se dedican a la actividad productora del café, las que en este momento sufren las consecuencias de la estrepitosa caída del grano en el mercado internacional.
