Así lo manifestó el mandatario hondureño, durante su disertación en la XXIII Cumbre Iberoamericana de Presidentes y Jefes de Estado, que se celebra desde anoche en la capital panameña con la participación de los gobernantes de Panamá, Ricardo Martinelli; Colombia, Juan Manuel Santos; Paraguay, Horacio Cartes; Costa Rica, Laura Chinchilla; Honduras, Porfirio Lobo; El Salvador, Mauricio Funes; México, Enrique Peña Nieto; Republica Dominicana, Danilo Medina y el jefe de gobierno español, Mariano Rajoy.
Lobo destacó que el papel político, económico, social y cultural de la comunidad iberoamericana, está cambiando en un nuevo contexto mundial y este año se han hecho esfuerzos y dado pasos significativos en los acuerdos de las cumbres iberoamericanas anteriores aprovechando las múltiples ventajas y potencialidades de las que dispone ese espacio de diálogo y concertación para alcanzar importantes transformaciones en las sociedades.
Recordó que en enero del próximo año, concluye su gestión como presidente de Honduras y aseveró que junto al pueblo, han logrado con enorme satisfacción, después de la profunda crisis que se vivió en 2009.
“Invitamos desde ya a todos los amigos iberoamericanos a que nos acompañen en su calidad de observadores y relatores internacionales, a ser testigos de esta fiesta democrática que consolida el normal desenvolvimiento democrático de Honduras y que tendrá su máxima expresión en las elecciones generales convocadas para el próximo 24 de noviembre”, excitó el mandatario hondureño.
Agregó que se está a la puerta de un nuevo proceso con una participación amplia, ya que anteriormente participaban cinco partidos y en esta ocasión son nueve instituciones políticas que se han inscrito para competir en el torneo electoral. “De manera que es una verdadera fiesta popular, democrática, representativa, libre y transparente”, aseguró.
En ese sentido, reiteró su llamado para el acompañamiento al proceso electoral para darles la bienvenida a ser testigos de la continuidad y fe democrática del pueblo hondureño al tiempo que agradeció a los países iberoamericanos por el apoyo que le dieron a Honduras para lograr su reinserción a la comunidad internacional así como por acompañar el proceso de reconciliación nacional que terminó con el acuerdo logrado en Cartagena de Indias con la mediación del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos y el extinto mandatario venezolana, Hugo Chávez.
